Imagen de lineales con bebidas alcohólicas en un supermercado. Efeagro/Pexels

Informe de Nielsen IQ

El súper debe racionalizar surtido para ganar rentabilidad, según un estudio

Publicado por: Efeagro 12 de mayo de 2021

Las cadenas de supermercados deben racionalizar el surtido de sus tiendas físicas y eliminar una parte de las referencias que actualmente tienen a la venta con el objetivo de ganar rentabilidad, según un informe de la consultura NielsenIQ publicado este miércoles.

“Las estanterías están repletas de productos que, en muchos casos, en lugar de ayudar al crecimiento de la categoría lo están lastrando”, han apuntado los especialistas de Nielsen IQ, quienes han relacionado esta necesidad de adaptar el surtido del súper a los cambios en los hábitos del consumidor provocados por la pandemia.
En el caso de España, la consultora detecta una elevada concentración de ventas en unos pocos productos en las categorías de cerveza, leche líquida y bollería.
“Eso implica que actualmente hay una ingente cantidad de referencias ocupando espacio en el lineal y vendiendo menos de lo deseado. Es necesario poner orden”, han remarcado.
El informe señala que, en los últimos años, las estanterías de los supermercados se han llenado de una gran variedad de marcas y productos con el propósito de ofrecer “nuevas variedades y experiencias”, pero esta apuesta puede incluso ir en contra de sus márgenes de beneficio.
Mientras que los fabricantes elevan sus costes al invertir para ampliar su portafolio, las cadenas acaban colocando en el lineal referencias “que no añaden valor, merman sus márgenes y aumentan la probabilidad de ‘stock'”.

La covid19 apremia

La revaluación del surtido es todavía más apremiante debido al impacto de la covid-19, según Nielsen IQ, que pone como ejemplo la aparición de un consumidor que ya está mirando el gasto al detalle por las dificultades económicas y que se ha vuelto “más exigente sobre qué, dónde, cuándo y cómo comprar”.

Paquetes de leche EFEAGRO/J.J.Ríos

De acuerdo a sus datos, el auge de las compras a través de internet -también de alimentación y bebidas- provoca una caída de las visitas a los establecimientos físicos, a lo que se suma que una parte de los clientes acude a la tienda “con listas y dedica menos tiempo a buscar en los lineales”.
Los consumidores con problemas económicos tendrán menos presupuesto para gastar, por lo que se centrarán más en lo esencial (…) El reto es asegurarse de que los productos y las marcas que ofrecen se adapten a los consumidores de todos los niveles, sin dejar de ser rentables y eliminando los no esenciales”, han incidido los autores del estudio.
Para los fabricantes plantean que identificar correctamente qué referencias retirar y cuáles conservar permitiría centrar sus esfuerzos en los productos con mejores ventas, y también “eliminar pérdidas, aumentar su rentabilidad y reinvertir los beneficios en el desarrollo” de alternativas que sí despierten interés en los clientes.