El Parlamento Europeo (PE) espera poder llevar a cabo votos clave en estos últimos meses de legislatura comunitaria antes de las elecciones como la luz verde a un posible acuerdo del ‘brexit’ o la Política Agraria Común (PAC).
En la Eurocámara hay más de 300 dosieres legislativos están pendientes de aprobación, razón por la que ya desde la sesión plenaria de diciembre se han doblado los turnos de voto diarios algunos días durante los plenos.
Los grupos políticos de la Eurocámara son conscientes de la importancia de poder dar cuentas a la ciudadanía del trabajo hecho en esta legislatura para movilizarla en la participación a los comicios del mes de mayo, dijeron a Efe fuentes parlamentarias.
La PAC ¿en primera lectura?
Apremia que se celebre antes del fin de las sesiones plenarias de esta legislatura -en abril- otras votaciones clave para los próximos años, como la nueva Política Agrícola Común (PAC), el instrumento que equivale al 40 % del presupuesto comunitario. El Gobierno de España ha instado a los eurodiputados a aprobar la reforma de la PAC en primera lectura antes de las elecciones europeas.
Según el ministro de Agricultura, Luis Planas, si no se consigue ese calendario se “tomará mucho tiempo” hasta que la próxima Comisión y la próxima cámara puedan aprobar la reforma de la PAC.
Planas: Si no se consigue ese calendario, se tomará mucho tiempo hasta que la próxima Comisión y la próxima Cámara puedan aprobar la reforma de la PAC
Por la misma razón, la presión de los euroescépticos podría derivar en bloqueos de asuntos sensibles.
Sin duda el voto históricamente más relevante será el del acuerdo del ‘brexit’, un convenio de divorcio entre la UE y Reino Unido que necesita la luz verde impepinable del hemiciclo de Estrasburgo, que previsiblemente tendrá lugar en la segunda mitad de febrero.

Todas las fuentes coinciden en destacar el factor de que el voto del ‘brexit’ se produzca en plena campaña electoral a las elecciones del Parlamento Europeo, con sus “agendas” nacionales en mente.
Para los grandes grupos de la Eurocámara, las diversas líneas rojas, incluida la frontera con Irlanda del Norte y los derechos de los europeos en Reino Unido, deberán estar más claras en el acuerdo para un voto favorable, ha dejado claro el coordinador del PE para el ‘brexit’, Guy Verhofstadt.
El pilar social
Otros votos clave de la legislatura, que en cuanto a trabajos parlamentarios terminará en apenas cuatro meses, son los relativos al pilar social, asuntos en los que la Eurocámara no ceja en hacer presión para que sean finalmente desbloqueados por el Consejo y los países que frenan su desarrollo.
Aunque algunas como la directiva de condiciones de trabajo transparentes y predecibles, que establece mejoras especialmente para los autónomos y trabajadores de plataformas como “Uber”, ya esté bien encarrilada, otras normativas sociales todavía están muy retrasadas.
Tampoco se completará, coinciden varias fuentes, la unión bancaria, imprescindible para que no se repitan crisis económicas como las que a principios de legislatura precipitaron tanto el ascenso del populismo y euroescépticismo como el propio ‘brexit’.
Las negociaciones de las reformas de los instrumentos para la reducción de riesgos y garantía de solvencia bancaria están encarrilados.
Sin embargo, no llegarán a buen puerto esta legislatura ni la reforma del Mecanismo Europeo de Estabilidad, ni tampoco las directivas de consolidación y armonización del impuesto de sociedades.
Pese a las dificultades, el eurodiputado de la comisión de Asuntos Económicos de la Eurocámara, Jonás Fernandez (PSOE), apostó por “mantener la presión hasta el último momento” para sacar adelante el máximo de trabajo “porque la situación económica de la zona euro es sensiblemente mejor que al principio de la legislatura (…) pero no estamos libres del riesgo que pueda haber una nueva desaceleración económica en los próximos años”.
Los éxitos de la Eurocámara
En el otro lado de la balanza, la Eurocámara consiguió contra pronóstico en los últimos meses desbloquear la directiva del Copyright y la nueva política de protección de datos.
Asimismo, desde 2014 también han tenido lugar votaciones trascendentes como la que puso fin al “roaming” de las compañías telefónicas dentro de la UE, los acuerdos comerciales con Canadá o Japón o las restricciones al uso de plásticos.
También se han puesto en marcha comisiones especiales para investigar y avanzar respecto a la lucha antiterrorista, el uso de pesticidas y la evasión y elusión fiscal de las grandes corporaciones multinacionales en Europa.