La conselleira del Mar de Galicia, Rosa Quintana, ha comentado que la situación de la marea roja en las Rías Baixas “empieza a evolucionar de forma positiva”.
Los últimos análisis dan indicios de que empieza a remitir la presencia de la toxina que ha provocado la marea roja en las a áreas marisqueras de Galicia.
“La sensación es que la cosa va a mejor”, ha dicho la conselleira, que intervino en el centro de formación del Instituto Social de la Marina en Bamio (Vilagarcía), en una conferencia sobre la posición gallega ante la reforma de la política pesquera de la Unión Europea.
Quintana destacó también los controles que permitieron detectar una partida de mejillones con la etiqueta falsificada. En este sentido, pidió “que un irresponsable no dañe la imagen profesional” del sector.
La conselleira apuntó que los baremos para los permisos de explotación marisquera, aunque “no recogen lo que a cada uno gustaría”, sí captan la “voluntad mayoritaria”.
La marea roja ha tenido la particularidad de que es la primera vez -desde 1998- en que las toxinas han afectado al mismo tiempo a viveros y bancos marisqueros.