El director gerente de la Organización de Productores Asociados de Grandes Atuneros Congeladores (Opagac), Julio Morón, ha participado en una reunión de la Seafood Alliance for Legality and Traceability (SALT), que agrupa a las principales fundaciones internacionales centradas en la lucha contra la pesca ilícita.
Morón ha expuesto los resultados de la norma voluntaria "Atún de Pesca Responsable (APR)", que aplican los atuneros de Opagac, y que consiste en una certificación de buenas prácticas tanto en materia ambiental como en las condiciones laborales, según un comunicado de Opagac.
Según Morón, la iniciativa APR "ha despertado un enorme interés global y puede convertirse en la base de una futura norma del Comité Europeo de Normalización (CEN), que esperamos que sea un referente para que el mercado continental exija estos estándares a las importaciones de atún".

Un sello sobre condiciones laborales a bordo

Opagac ha recordado que la iniciativa, que los atuneros pusieron en marcha hace año y medio, "gana terreno como un referente mundial de buenas prácticas pesqueras, en buena medida" por ser el único que contempla las condiciones sociolaborales a bordo.

El distintivo APR distingue a buques de bandera española y extranjera que desarrollan su actividad minimizando el impacto medioambiental, cumpliendo las diferentes normativas internacionales de control y garantizando las condiciones del Convenio 188 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El respeto a los derechos laborales es "fundamental para evitar la violación de los derechos humanos o prácticas como el esclavismo, el tráfico de personas o la explotación laboral infantil que, en ocasiones, se dan en buques de terceros países", según el comunicado.
Opagac ha planteado la extensión de las citadas normas a todas las flotas a nivel global, con el fin de erradicar la pesca ilegal y reforzar el compromiso de la industria.