La reserva de agua suma casi cuatro meses consecutivos de descenso -desde el pasado mayo- y se sitúa ya al 43,3 % de su capacidad total, con 24 325 hectómetros cúbicos. Es una disminución de 666 hectómetros, un por 1,2 ciento menos respecto a la semana anterior.
Durante la última semana, las precipitaciones han sido abundantes en la vertiente mediterránea y escasas en la vertiente atlántica; la máxima se ha producido en Barcelona con 86,5 litros por metro cuadrado, según los últimos datos del Ministerio para la Transición Ecológica.
Nueva gota fría
La gota fría que desde el lunes afecta al noreste peninsular y se extendió ayer a todo el arco mediterráneo, dejó inundaciones, cortes en el suministro eléctrico y crecidas de ríos. A última hora de la noche se trasladó a Baleares y la Comunidad Valenciana, donde permanecerá estacionaria dos días más.
El archipiélago balear ha estado bajo aviso naranja -riesgo importante- por acumulaciones que podrían superar los cien litros por metro cuadrado en doce horas y por rachas de viento de hasta 60 kilómetros por hora, según las predicciones de la Agencia de Meteorología (Aemet).
También Cataluña estuvo bajo aviso naranja por fenómenos costeros, con olas de entre tres y cuatro metros, lluvias acumuladas de hasta 20 litros por metro cuadrado y vientos de hasta 60 kilómetros por hora en el Ampurdán.
Otras nueve comunidades -Andalucía, Aragón, Cantabria, Castilla y León, Madrid, Comunidad Valenciana, La Rioja, País Vasco y Asturias- y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla tienen aviso amarillo por lluvia, tormentas, viento y fuerte oleaje.
