Representantes del sector agrario han pedido en la feria Fruit Attraction que se reduzcan las trabas administrativas y aumente el apoyo para poder innovar en favor de una cadena agroalimentaria sostenible y adaptada a los nuevos retos.
En un acto sobre el valor estratégico del sector agroalimentario antes y después de la pandemia, el vicepresidente de la Alianza por la Agricultura Sostenible (ALAS), Juan Ignacio Senovilla, ha subrayado la necesidad de “defender las formas de producir y las herramientas” de las que dispone el sector.
Ha mencionado tres “frentes” que amenazan la agricultura en España, como son la competencia con otros países europeos que tienen un clima mejor, la estrategia de la Comisión Europea “De la granja a la mesa” y el cambio climático.
Sobre este último aspecto, ha reclamado la declaración de España como “laboratorio de cambio climático” porque, cuando este fenómeno llegue a otros países del norte de Europa, los agricultores y ganaderos españoles ya habrán invertido de su propio bolsillo en soluciones que podrán ser exportadas.

Senovilla ha reivindicado la labor del sector primario en garantizar una alimentación de calidad, que cuesta un 20 % menos a las familias en comparación con lo que gastaban hace treinta años, y el empleo de dos millones de personas que fijan población en los pueblos y mantienen el medio ambiente de las zonas rurales.
El director de la Asociación Empresarial para la Protección de las Plantas (Aepla), Carlos Palomar, ha considerado que el actual sistema está “demasiado regulado” y es “muy burocrático”, donde hay un “abuso del principio de precaución” en lugar de gestionar el riesgo.
Para la industria de los fitosanitarios, esto significa que deben renunciar a nuevas soluciones a los problemas del campo, según Palomar, que ha pedido más flexibilidad y que se incrementen los fondos destinados a la innovación.
Ha recordado que la patronal europea de fabricantes de fitosanitarios se ha comprometido a invertir 10.000 millones de euros en agricultura de precisión e innovación para 2030, y otros 4.000 millones en biosoluciones y biocontrol.
El jefe técnico de la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas Vivas (Fepex), Luis Martín, ha alertado del problema que supondrán para el sector las restricciones en la disponibilidad de herramientas y ha pedido que se evalúen los objetivos europeos de reducción de insumos.
Ha lamentado que la Comisión Europea “no establezca recursos financieros” en investigación, desarrollo e innovación acordes a las cifras del sector agroalimentario para mantener su competitividad.
“Tenemos que intentar cerrar la brecha con nuestros competidores”, ha destacado el responsable de Fepex, que ha citado los casos del tomate y la pera, cuyos rendimientos en invernadero son menores en España que en los Países Bajos.
Además, ha exigido reciprocidad para que los productos importados de terceros países tengan las mismas exigencias ambientales que los producidos dentro de la Unión Europea.
En la charla, organizada por ALAS y Aepla, el subdirector de Innovación Agroalimentaria de Cajamar, Ricardo García, ha presentado un estudio sobre el sector agroalimentario español.
El informe destaca el aumento del peso del sector, hasta representar el 9,7 % del valor añadido de la economía española, y el empuje de las exportaciones, que alcanzaron un máximo histórico de ventas de 54.840 millones de euros en 2020 a pesar de la pandemia.
García ha advertido de la “atomización excesiva” del sector en España y ha apostado por seguir innovando en tecnología, canales de venta y logística, así como en materia de agua.
El director de PwC en España, Jordi Esteve, ha citado las tendencias, recogidas en otro informe, que afectarán a la evolución de la agroalimentación, entre ellas la escasez de recursos y el cambio climático, la revolución tecnológica, el proceso de urbanización y los cambios demográficos y en los poderes económicos mundiales.
El director general del Foro Interalimentario, Víctor Yuste, ha instado a los diferentes eslabones de la cadena alimentaria a entenderse más entre ellos y a los legisladores les ha pedido un mayor apoyo en la ciencia para tomar decisiones.
Por parte de la federación de consumidores Unae, su asesor y gestor de proyectos Manuel Martín ha destacado el reto de la cadena de dar satisfacción a un “amplio espectro de consumidores”, que priman sobre todo la calidad, las preferencias personales y el precio, y que en los próximos años estarán marcados por la brecha digital entre los jóvenes y los mayores de 65 años.
Apoyo al plátano canario
La Asociación de Organizaciones de Productores de Plátano de Canarias (Asprocan) ha llegado a un acuerdo con La Unión Corporación, con sede en El Ejido (Almería), para aplicar una nueva técnica de congelación a la producción de plátano afectada por las cenizas del volcán de La Palma.
El presidente de la Asprocan, Domingo Martín, ha explicado en Fruit Attraction que el acuerdo es para el aprovechamiento de una parte de la fruta que hoy está sufriendo daños “meramente estéticos” en la piel exterior por el volcán, que impiden que sea comercializada pero que cumple con criterios óptimos de consumo.
“La Unión nos ha ofrecido esta idea brillante, que no solo es aprovechable para nuestra situación actual, ya que además es compatible con nuestra política de aprovechamiento de los desechos de los frutos”.
La producción anual que se va a perder por las cenizas estará entre los 30 millones y los 40 millones de kilos, según las estimaciones de Asprocan, ha comentado Martín, quien ha indicado que será el sector platanero el que asuma el coste de los envíos de los contenedores a la Península.
El director de La Unión, Jesús Barranco, ha mostrado su agrado por poder “colaborar con los productores de plátano canario en una situación tan difícil para todos los agricultores de La Palma”.
Ha explicado que la planta de transformación de productos de la empresa cuenta con una tecnología única de congelación en Europa, fruto de un acuerdo con Nice Tech, que consigue mantener la fruta durante el tiempo que sea necesario, conservando sus cualidades de sabor, textura y nutrientes una vez descongelada.
La Unión tiene previsto empaquetar el plátano canario como producto de cuarta gama, pelado y cortado y listo para comer, sin haber perdido sus propiedades organolépticas, ya que su estructura interna no se modifica.
Barranco ha avanzado que la intención es destinar en un principio los primeros lotes de plátano de cuarta gama a bancos de alimentos y comedores sociales.
La lava del volcán Cumbre Vieja ha enterrado ya unas 40 hectáreas de plataneras, aunque la “zona cero” de superficie afectada por la erupción y sus cenizas ronda entre las 450 y 500 hectáreas, según ha apuntado a Efeagro el gerente de Asprocan, Sergio Cáceres.
Ha explicado que los productores de La Palma también han constatado que los efectos de la ceniza que se está expandiendo por muchas parcelas de las plataneras que siguen en pie se está traduciendo en una rebaja de los rendimientos al 20 % o 30 %.
Este miércoles se han congregado frente al stand de Asprocan docenas de participantes, convocados por la organización del evento a un aplauso de un minuto para solidarizarse con los agricultores palmeros a las 13 horas.