Por ello, la patronal ha pedido en un comunicado a la distribución “ajustar sus exigencias a la realidad de la campaña” y al consumidor comprensión, que “entienda” que la fruta es un producto 100 % natural que depende de las condiciones climatológicas.

“El calor extremo que han vivido este verano las zonas productoras de fruta de pepita de toda Europa ha provocado una disminución en los calibres de los frutos“, ha detallado Fepex.

Y es que en situaciones de estrés ya sea hídrico o por temperaturas extremas el árbol ralentiza su crecimiento y prima la supervivencia por delante del crecimiento del fruto, por lo que el calor extremo de este verano “ha provocado que los árboles den fruta más pequeña en toda Europa”, han detallado desde Fepex.

Espera que, seguramente, esto provoque en los próximos días una actualización a la baja de los kilos de fruta de pepita previstos para esta campaña.

Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), el mes de junio ha sido muy cálido y el de julio extremadamente cálido, con unas temperaturas medias en la España peninsular de 21,8 °C en junio y 25,6 °C en julio.