La Unión Europea (UE) y el Reino Unido comienzan su primera ronda de negociaciones para el acuerdo comercial tras el Brexit, la salida británica del bloque comunitario que se produjo el pasado 31 de enero.
El periodo de negociación concluirá el 31 de diciembre, durante el cual el Reino Unido, que ya ha dicho que no prorrogará ese plazo, permanece dentro de las estructuras comunitarias.
Las conversaciones para determinar la nueva relación entre ambas partes se producirán de forma paralela en hasta once sectores, a lo largo de distintas rondas, para intentar cerrar un acuerdo este año.

Estas áreas son las siguientes: comercio de bienes, comercio de servicios e inversión, igualdad de condiciones, transporte, energía y cooperación civil nuclear, pesca, movilidad y coordinación de la seguridad social, cooperación judicial en materia criminal, cooperaciones temáticas, participación en programas europeos y gobernanza y asuntos horizontales.
El Reino Unido está dispuesto a dejar la negociación con la Unión Europea en junio si para entonces no hay un consenso sobre “las líneas generales” del futuro acuerdo comercial bilateral, en cuyo caso el país pasaría a regirse por las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), lo que implicaría más trabas comerciales.
La UE considera igualmente que será necesario hacer un balance de progresos en junio con el fin de analizar las oportunidades de lograr un acuerdo.