Profesionales de la Secretaría General de Pesca del Ministerio y de la Delegación de Gobierno en Galicia han coordinado las inspecciones simultáneas en empresas de Boiro, Ribeira y A Coruña, dentro de la Operación Sparrow, para comprobar si tienen relación con buques que operan de forma ilícita en aguas antárticas.

El Ministerio ha explicado que en los próximos días se analizará en detalle la documentación recabada durante la operación y, como resultado, podrían acordarse nuevas actuaciones, así como la apertura inminente de procedimientos sancionadores en materia de pesca.

La Ley de Pesca Marítima establece penalizaciones por incumplimiento de las leyes que, si son muy graves, pueden ascender hasta 600.000 euros e implicar la inhabilitación para el ejercicio de actividades pesqueras.

El Ministerio ha explicado que "los resultados y las eventuales ramificaciones que puedan abrirse gracias a la Operación Sparrow pueden suponer un apoyo fundamental para distintas investigaciones internacionales abiertas por países y organizaciones aliados en la lucha contra la pesca ilegal", con los que España está dispuesta a cooperar "estrechamente".

"Este operativo constituye un éxito para todo el sector pesquero español y pone de manifiesto la inquebrantable voluntad del Gobierno para utilizar todas las herramientas políticas y legales disponibles en la lucha contra con la pesca ilegal, independientemente de su origen", según un comunicado del Ministerio.