El Gobierno está “atento” a la evolución de las precipitaciones y cómo puede afectar la falta de lluvias a las producciones. Mientras, la reserva hidráulica se mantiene en el 58 % y se sigue apostando por las políticas “sostenibles y equilibradas” de modernización de regadío.
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ya dijo ayer que su Departamento está atento a la evolución de los cultivos en España ante la escasez de precipitaciones en los últimos meses antes de adoptar medidas concretas.
Se está haciendo un seguimiento “de las situaciones que pueden plantearse” en los cultivos para implementar las “medidas de remedio que pudieran ser oportunas”.
No obstante, cree que “aún es muy pronto” para ello ya que es necesario ver “cuál es la situación” y la evolución. Y que es importante estar atento a las previsiones para concretar si esta primavera el campo dispondrá o no de la suficiente agua. Hay organizaciones agrarias, como Asaja, que ya han pedido a las administraciones informes de la situación por comarcas.
La reserva esta semana
Por el momento, el agua acumulada en los embalses peninsulares ha vuelto a disminuir durante la última semana y se ha situado en el 58,1 por ciento de su capacidad total. Según los datos facilitados por el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco), los embalses peninsulares han perdido durante la última semana 218 hectómetros cúbicos de agua, lo que supone el 0,4 por ciento de la capacidad total de los pantanos.

Los embalses acumulan en la actualidad 32.627 hectómetros cúbicos de agua, una cantidad inferior a la del año anterior en las mismas fechas (34.979 hectómetros cúbicos de agua) y muy inferior a la media de los últimos diez años (de 39.589 hectómetros cúbicos).
Solo en cinco cuencas (la del Duero, la cuenca Mediterránea Andaluza, la del Segura, el Júcar y las cuencas internas de Cataluña) la situación es mejor que la del pasado año en las mismas fechas.
Durante la última semana las precipitaciones han sido escasas en toda España, según los datos facilitados por el Miteco, que ha señalado que la máxima se registró en Valencia, con 16,8 litros por metro cuadrado.
Los regadíos, cada vez más modernos
La agricultura es una gran consumidora de agua y, en este sentido, el ministro ha valorado que más de la mitad de la superficie regada en España utilice ya el riego localizado o por goteo, lo que refleja el “uso eficiente” del agua y sirve para “acallar las voces” que “ponen en tela de juicio” estos sistemas agrícolas. Esta agricultura aporta beneficios de índole económica, social y medioambiental aunque también se enfrenta a desafíos en esas áreas que tiene que afrontar para que siga siendo “motor” en el desarrollo económico del medio rural, según Planas.
Su Ministerio, dijo, apuesta por el regadío a través de políticas territoriales “equilibradas, sostenibles y ordenadas”, que “permitan continuar con la modernización” de las prácticas de riego.
Gracias al trabajo de las administraciones y de los regantes, desde finales de la década de los 90 se ha podido actuar en la modernización de 1,4 millones de hectáreas mediante la inversión de 3.800 millones de euros, ha detallado.