El Congreso de los Diputados ha aprobado esta semana -con los votos del PSOE y Unidos Podemos- una iniciativa para pedir al Gobierno que cambie el reparto de las capturas. En Galicia, el secretario general de Pesca, Alberto López-Asenjo, ha abogado por un mecanismo que permita sacar el máximo provecho de las cuotas en los caladeros.
Entre las tareas pesqueras para la nueva legislatura, el sector destaca la necesidad de debatir sobre capturas en el Cantábrico noroeste.
La ministra de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, se comprometió a abordar una mejora de la regulación de las aguas nacionales, de acuerdo con el sector y las autonomías afectadas.
La ordenación del caladero nacional ha sido una de las cuestiones más importantes del Gobierno durante los últimos años en pesca.
El Ministerio empezó a aplicar en 2014 un sistema de gestión de la pesca individual por buque, con cuotas por provincias o asociaciones.
Su objetivo fue acabar con la “pesca olímpica”, en la que todos los barcos acudían a la vez a faenar hasta agotar cuota. Los más críticos fueron Asturias y un segmento de la flota gallega, quienes presentaron recursos judiciales. Del lado contrario, Cantabria y el País Vasco han defendido este sistema, así como otra parte del sector de Galicia.

Ese plan nacional ha salido a relucir en el Congreso. La Comisión de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente de la Cámara Baja ha aprobado una proposición no de ley del PSOE para pedir un cambio del reparto del Cantábrico y noroeste. Ha sido respaldada Unidos Podemos.
Los ejemplos del jurel o la caballa
La portavoz socialista de Pesca en el Congreso, Margarita Pérez, se ha referido a los “desequilibrios” en la caballa (verdel o xarda) y a que en el jurel, en 2015 el cerco gallego agotó en junio su cuota, mientras que otras autonomías solamente habían consumido una parte.
Diego Movellán (PP) ha defendido que el Gobierno impulsó el plan para abordar un problema ante el que otros “miraron hacia otro lado”.
Joseba Agirretxea (PNV) ha remarcado que la iniciativa parlamentaria perjudica los intereses de la flota vasca y ha justificado la regulación actual.
Respuesta del Gobierno
En Santiago de Compostela, Alberto López-Asenjo ha abogado por un mecanismo que permita sacar el máximo partido de los cupos del Cantábrico noroeste.
López-Asenjo ha sugerido “identificar” el margen de maniobra de los pescadores. En su opinión, se está pidiendo un incremento de cuotas sin haber utilizado “plenamente” las disponibles.
Según el secretario general, actualmente hay pendientes de cubrir un contingente de 1.000 toneladas de caballa y otro de 6.000 toneladas de jurel.
El Ministerio prevé efectuar negociaciones con las comunidades autónomas para estudiar medidas que contribuyan al aprovechamiento óptimo de los recursos.