La producción de 2020 será la segunda mayor en la historia del país, tan sólo superada por la de 2018 (61,7 millones de sacas), según las proyecciones de los técnicos de la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab), órgano vinculado al Ministerio de Agricultura.

Los números confirman el ciclo bianual del café, por el que toda cosecha buena es precedida por una de poca producción.

La nueva previsión fue realizada con base en las visitas que los técnicos de la Conab realizaron a regiones productoras en agosto, cuando se había recogido cerca del 90 % de la cosecha de café de este año.

La producción definitiva de 2020 será divulgada en diciembre, cuando la Conab realice el cuarto y último cálculo del año.

Según el organismo, el aumento de la producción con respecto al año pasado fue impulsado por el crecimiento del 38,1 % de la producción de café del tipo arábigo, gracias a las condiciones climáticas favorables.

Brasil recogerá este año 47,4 millones de sacas de café arábigo, un volumen sólo superado por el de 2018 (47,5 millones de sacas).

En contrapartida, la producción del grano de tipo conilon, de mejor calidad pero que es menos común en Brasil, se limitará a 14,3 millones de sacas, con una caída del 5,1 % frente a la de 2019.

Esa reducción fue provocada por las condiciones climáticas desfavorables en las zonas productoras del estado de Espíritu Santo, el principal productor de conilon en Brasil.

De acuerdo con la Conab, pese a tratarse de un año de producción elevada en el ciclo bianual del café, los precios del producto en el mercado internacional no cayeron tan fuerte, lo que benefició tanto a productores como exportadores.

Según el Consejo de los Exportadores de Café de Brasil (Cecafé), la cotización internacional del café brasileño cayó un 4,7 % en el último año, desde 124,55 dólares por saca en agosto de 2019 hasta 118,71 dólares el mes pasado.

Además, la fuerte apreciación que ha registrado el dólar frente al real en lo que va de este año también favoreció a los exportadores y compensó la ligera caída de los embarques externos.

Brasil exportó en agosto de este año 3,26 millones de sacas del grano, con una caída del 3,3 % frente al mismo mes del año pasado, que le dejaron ingresos por 386,6 millones de dólares, un valor un 7,9 inferior al de agosto de 2019.

En el acumulado de los ocho primeros meses del año Brasil exportó 26,37 millones de sacas, con una reducción del 3,0 % frente al mismo período del año pasado, y que le rindieron un valor de 3.365 millones de dólares, tan sólo en un 0,8 % inferior al de los ocho primeros meses de 2019.

"El escenario de precios elevados motivó al productor a vender gran parte de su cosecha de forma anticipada. De la cosecha que se recogerá entre julio de 2020 y junio de 2021 el 60 % ya fue comercializado, frente al 47 % en el mismo período del año pasado", según la Conab.