Acerga, que representa a 120 barcos del cerco gallego , instaló en Santiago de Compostela un campamento para reivindicar que la distribución de las posibilidades de pesca se hiciese de manera lineal y por tripulante.

El presidente de Acerga, Juan José Blanco Agraso, avisó de que hoy volvían a su trabajo porque ellos ya no podían aguantar más tiempo en situación de inactividad, pero la lucha "no cesa".

Después de tres meses de negociaciones y contactos, ha celebrado que se rectificase la postura inicial sobre el actual sistema y se procediese a habilitar una cuota mayor que la prevista inicialmente, de manera que Acerga, que agrupa al 80% de la flota, ha conseguido dotarse este 2016 de un 17% mas de cuota respecto a la asignada en un principio y ha logrado que buques sin historial dispongan de un mínimo de capturas que varía en función de sus toneladas de arqueo.

Acerca ha avanzado, no obstante, que batallará para que se tengan en cuenta las necesidades reales de cada embarcación y ha denunciado el "trato de favor" que entienden que recibe Cerqueiros Galegos, -que defiende un reparto por criterios históricos-, por parte de la Xunta.

Acerca ha recordado que la Secretaría General de Pesca admitió que el vigente sistema de reparto no satisface las necesidades de la mayor parte de la flota española pero también que en este momento es imposible de modificar por tratarse de "un gobierno en funciones".

Las mujeres de los armadores y marineros del cerco gallego han anunciado que serán su voz y su aliento y se ocuparán de que sus peticiones continúen estando presentes hasta la consecución de "una victoria".