Conseguir ese “no-sé-qué” tan característico de las parisinas, ese ser elegante sin proponérselo, esa sobriedad cargada de encanto femenino… ¿difícil, verdad? Quienes se quieran empapar de estas consignas deben echar un vistazo a Estilo parisino. Un toque de glamour francés para crear tu propio look, un libro que trata de ayudar a sus lectoras a conseguir ese toque “chic” de la moda parisina, sin renunciar a su propio estilo.

Para conseguirlo, Isabelle Thomas (periodista especializada en moda) y Frédérique Veysset (fotógrafa) han entrevistado a diseñadores, estilistas, periodistas y perfumistas, han fotografiado a algunas de las mujeres más elegantes de la capital francesa y han recopilado sus conclusiones en un libro cargado de consejos y con inspiradoras imágenes que ilustran la esencia del estilo parisino.

Un libro que te ayuda a “encontrar tu rúbrica para desmarcarte de la masa” , tal y como indica en sus páginas, y que se plantea cuestiones como si hay que seguir la moda o si es la moda la que debe adaptarse al gusto de cada cual.

Un buen puñado de consejos

Además de un sentido reflexivo acerca de qué tiene el estilo parisino para que guste tanto, el libro tiene sin duda un enfoque práctico, con consejos que, por ejemplo, dan ideas para aportar un toque de clase a las prendas baratas.

Combinarlas con accesorios que potencien su encanto, mezclarlas con tejidos de calidad y “tunearlas” con detalles personales pueden conseguir que ropa de saldo forme parte de un look único y elegante. Para conseguirlo, no hay que saltarse algunas recomendaciones básicas: las gafas mal escogidas afean la cara y los zapatos malos nunca son una opción.

El libro busca que las lectoras se sientan a gusto con la moda del momento, adaptándola a su propio estilo, nunca al revés

Ahorrar para adquirir una chaqueta o unos zapatos de calidad, que durarán años en el armario como una elección segura, frente a la compra de varias unidades a bajo precio es una de las grandes premisas del libro que se esfuerza también por enterrar mitos como la idea de que el estampado pantera es hortera o que el negro le sienta bien a todo el mundo.

En cuanto a los must, o imprescindibles en el armario, la lista es amplia y exige una inversión que a buen seguro se verá recuperada a medio o largo plazo, ya que se trata de prendas que siempre ayudarán a completar un estilismo con un toque de calidad. Unas botas (“buenas”, puntualizan los autores), sandalias artesanales, camisa blanca (o negra) rescatada de un armario masculino, jersey de pico, chinos y gabardina son algunas de las prendas imprescindibles para hacerse con un fondo de armario a prueba de temporadas.

Todo ello sin sentar cátedra, sino dejando que cada lectora adapte los consejos a su propio cuerpo y estilo, de manera que se sienta cómoda y para que, cuando salga de la tienda con ropa recién comprada, no sienta que al ponérsela se estará disfrazando con una moda que no es la suya.

De visita por París

Y qué mejor forma de empaparse del auténtico estilo parisino que dándose una vuelta por la capital francesa para hacer compras o, sencillamente, disfrutar de su gastronomía.

El libro incluye un directorio con sitios para almorzar, tiendas y locales ideales para una buena cena en diferentes zonas de la ciudad. Desde el área del Louvre hasta Le Marais pasando por Montmartre.

Entre las tiendas, las hay de lo más variado. Galerie 1962 acoge lámparas de los años 50; Les Parapluies Simon con paraguas, sombrillas y bastones de diseño original y fabricación artesanal; los almacenes típicamente parisinos Franck & Fils en los que se pueden encontrar accesorios y joyas de jóvenes diseñadores; o Fifi Chachnill para encontrar ropa interior propia de una estrella de Hollywood. Opciones para todos los gustos y bolsillos que son una buena excusa para pasearse por París.