La Comisión Europea (CE) dio luz verde este viernes a cien millones de euros de ayudas concedidos por Francia a su sector pesquero, que podrían ser las primeras en financiarse con cargo a la futura reserva de ajuste al Brexit, actualmente en negociación entre las instituciones europeas.
La ayuda pretende paliar las consecuencias sobre el sector pesquero francés de la retirada del Reino Unido de la Unión Europea, con la consecuente reducción de su porcentaje de cuota, según prevé en el acuerdo de comercio y cooperación entre la UE y el Reino Unido.
Las ayudas fueron aprobadas bajo las normas de las ayudas de Estado, indicó la CE en un comunicado.
Son las primeras medidas de apoyo aprobadas por la Comisión en el contexto de los debates entre instituciones sobre la propuesta de una reserva de ajuste al Brexit.
Bruselas precisó, no obstante, que la decisión de hoy no prejuzga si las medidas serán eventualmente elegibles para ser financiadas con cargo a la reserva del Brexit, algo que será analizado una vez entre en vigor la normativa sobre esa reserva.
Sin embargo, “dan a Francia la certidumbre legal de que la Comisión considera que cumplen las reglas de la UE sobre ayudas de Estado, con independencia de su fuente de financiación final”.

La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea (CE), Marguethe Vestager, señaló que el sector pesquero es “uno de los más afectados por el Brexit”, al exigir a los pescadores y a los operadores del mercado afectados reorganizarse y adaptarse a la nueva situación.
Los tres esquemas franceses aprobados hoy, con un presupuesto total de 100 millones de euros, “son las primeras medidas de apoyo al sector en el contexto de la Reserva de Ajuste del Brexit propuesta. Continuaremos trabajando en estrecha colaboración con todos los Estados miembros interesados para permitir soluciones rápidas y eficaces para mitigar el impacto del Brexit”, dijo Vestager.
Por otra parte, la Comisión Europea indicó este viernes que los problemas de permisos para el acceso de los buques a las respectivas aguas tras el Brexit se están dando no en relación con los barcos británicos que faenan en aguas de la UE, sino por parte de la autoridades británicas y que afectan a 20 licencias de buques europeos que “siguen pendientes”.
“Nuestra prioridad es que las solicitudes de licencias sean tratadas inmediatamente“, dijo la portavoz comunitaria de Pesca, Vivian Loonela.