Hay lugares paradisíacos donde la mente echa a volar. Suelen ser parajes remotos en plena naturaleza. Hay otros que podrían ser de ensueño si no estuvieran siempre abarrotados. La Acrópolis de Atenas es uno de ellos.
Hay lugares paradisíacos donde la mente echa a volar. Suelen ser parajes remotos en plena naturaleza. Hay otros que podrían ser de ensueño si no estuvieran siempre abarrotados. La Acrópolis de Atenas es uno de ellos.