Agricultores en plena fumigación. Efeagro/Jeffrey Arguedas

Agricultores en plena fumigación. Efeagro/Jeffrey Arguedas

EL 30% DE LOS ALIMENTOS SE DESPERDICIA

Biotecnología para luchar contra las plagas y contra el desperdicio de alimentos

Publicado por: EFE 24 de febrero de 2020

El desperdicio de alimentos, las plagas y las enfermedades del campo son problemas que se pueden enfrentar mediante el uso de la biotecnología y la innovación de mejoramiento vegetal, dijo este miércoles el director ejecutivo de la Asociación Mexicana de Semilleros A.C. (AMSAC), Mario Puente.

Según datos de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), aproximadamente un 30% de los alimentos producidos para el consumo humano en todo el mundo se pierde o se desperdicia cada año.
Ese mismo porcentaje es el que se registra en las pérdidas de las cosechas en todo el mundo por plagas y enfermedades vegetales.
Para Puente, la producción de alimentos en México supone varios retos. “El primero ocurre durante la producción en el campo al enfrentar el impacto negativo de las plagas y enfermedades, y el segundo se da cuando los alimentos están a disposición del consumidor” y comienzan su proceso de descomposición, expuso en una entrevista con Efe.

Semillas más resistentes y alimentos más duraderos

Ante este escenario, Puente dijo que la Amsac trabaja en el desarrollo de innovaciones “que permitan generar semillas que resistan plagas y enfermedades durante el proceso de producción para reducir pérdidas y reducir el uso de productos químicos en la agricultura e incrementar el rendimiento de los alimentos”.
Por otra parte, dijo que también trabajan en innovaciones para que los alimentos tengan mayor “vida de anaquel”. Es decir, “que no se desperdicien o no se echen a perder tan rápidamente” y como ejemplo puso las innovaciones que están desarrollando para que las patatas, los cítricos o las manzana no entren en oxidación “tan rápido”.
Puente explicó que desde la creación de las semillas se puede contribuir para reducir impactos negativos en los alimentos, en producción en campo y en la reducción de desecho de alimentos una vez que ya está en el mercado.
Precisó que evitar el proceso de descomposición de un alimento tiene que ver con la “composición genética de los productos, hay genes, o parte de los genes que son los que provocan el deterioro productos” y es ahí donde entra el trabajo de los semilleros, quienes identifican los genes que detonan ese proceso de degradación para que posteriormentey ese gen o genes se apaguen y el producto tenga mayor vida”.
La Amsac está integrada por 73 empresas de semillas, mexicanas e internacionales, así como proveedores de servicios para la industria semillera, que producen, investigan y comercializan semillas.

Detalle de la fecha de caducidad de varios yogures en un lineal de supermercado. EFE/Juanjo Martin
Detalle de la fecha de caducidad de varios yogures en un lineal de supermercado. EFE/Juanjo Martín

En redes sociales, la asociación dio algunas recomendaciones para reducir el desperdicio de alimentos.
Entre ellos, recomendó a los consumidores hacer una lista de la compra para adquirir solo lo que se necesita, comprender las fechas de los alimentos y comprar también frutas y verduras “feas” que son rechazadas por su forma o aspecto.
Según la Amsac, el impacto ambiental de la pérdida y desperdicio de comida genera el 8 % de las emisiones globales de gases de efecto invernadero y el volumen de agua utilizado para producir esa cantidad de comida desperdiciada equivale a 3 veces el volumen del Lago Ginebra que es de 89 kilómetros cúbicos, es decir, 267 kilómetros cúbicos.
La asociación recordó que el 30 % de la tierra agrícola del mundo se utiliza para producir alimentos que nunca serán consumidos y que si se usan y distribuyen mejor los alimentos, el 14 % de todas las emisiones provenientes de la agricultura se podrían evitar en 2050.
Según la FAO, en costos económicos, el desperdicio de alimentos a nivel mundial representa 1 billón de dólares, cerca de 700.000 millones de dólares en costos ambientales y alrededor de 900.000 millones de dólares en costos sociales.

Secciones : Innovación