Establecer una hoja de ruta para conocer y mejorar la biodiversidad marina en la subregión de la Macaronesia, en el entorno a archipiélagos de Canarias, Madeira y Azores; este es el reto del proyecto Mysticseas, que ha arrancado este mes y que cuenta con un presupuesto de casi 650.000 euros.
Uno de los socios del proyecto es la Fundación Biodiversidad del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente (Magrama) y su subdirector, Ignacio Torres, ha explicado a Efeagro que en un primer momento se hará un análisis de la situación para detectar las lagunas de conocimientos que hay en este tema. A partir de a ahí, se establecerán estrategias comunes para proteger la biodiversidad marina en esta zona, denominada Macaronesia, en la que se ubican las islas Canarias y los archipiélagos portugueses de Azores y Madeira.
La idea es que las administraciones que tienen competencia en este ámbito trabajen de “forma homogénea y similar” y establezcan un plan de acción que sirva para el futuro, ha detallado Torres. Misticseas se centrará en las poblaciones de especies de cetáceos, tortugas y aves marinas, en una región que cuenta con una “biodiversidad descomunal”, ha subrayado el subdirector de la Fundación Biodiversidad.

“Es fundamental la coordinación” ha señalado, para garantizar la correcta monitorización de las 28 especies de cetáceos que hay en esta región, las especies de aves, algunas endémicas de la zona, y las de tortugas marinas que migran por estas aguas.
Un tesoro de la biodiversidad
La subregión Macaronésica es una de las más extensas, con mayor biodiversidad y menos estudiada de los mares europeos. Mistecseas se enmarca en la directiva comunitaria para al política del medio marino que busca el buen estado ambiental de los océanos para 2020, un desafío para el que es fundamental la coordinación de los Estados Miembro.
En este caso, son seis socios los que forman parte de la iniciativa: el Instituto Español de Oceanografía, la Dirección Regional de Asuntos del Mar del Gobierno Regional de las Azores, la Secretaría Regional de Medio Ambiente y de los recursos Naturales de Madeira y la Dirección General de Recursos Naturales, Seguridad y Servicios Marítimos del Gobierno de Portugal, además de la Fundación Biodiversidad.
En concreto, la Fundación se encargará de la coordinación de los grupos de trabajo que trabajarán en Madeira, de las labores de sensibilización y de la coordinación del plan de acción, ha explicado Torres. El proyecto, que arrancó el pasado 1 de diciembre y que se prolongará hasta el 28 de febrero de 2017, cuanta con el apoyo de la Unión Europea que ha cofinanciado el 80 por ciento del presupuesto total.