AGRICULTURA ALEMANIA

La estrategia alemana de bioeconomía ¿será nociva para la producción alimentaria sostenible?

Publicado por: Por Florence Schulz (EA.de/EA.com)/W.Heller (EuroEFE.EA.es) 27 de enero de 2020

El gabinete federal alemán aprobó una nueva estrategia de bioeconomía, la cual ha sido fuertemente criticada por el hecho de que en ella apenas se ha mencionado la reforma de la PAC y se ha centrado, se asegura, “demasiado” en la tecnología y en la optimización.

La semana pasada, el gabinete federal alemán aprobó una nueva estrategia de bioeconomía, la cual ha sido fuertemente criticada por el hecho de que en ella apenas se ha mencionado la reforma de la Política Agrícola Común (PAC), y se ha centrado, se asegura, “demasiado” en la tecnología y en la optimización, según informa el portal alemán EURACTIV.de, socio de EFE.

La ministra germana de Agricultura , Julia Klöckner, sueña con que, algún día, exista una sociedad con mayor oferta de productos reciclados, entre ellos puertas de coches hechas con fibras de cáñamo o botas de goma fabricadass a partir del maíz, por ejemplo. Alemania cuenta desde el pasado 15 de enero con una nueva estrategia de bioconomía: se trata de la tercera de este tipo, y actualiza las anteriores, de 2010 y 2013.

La lógica de la nueva estrategia germana es realmente simple: la economía debería, paulatinamente, utilizar materias primas renovables, muchos menos dependiente del carbón, el petróleo o el gas. Al tiempo que usamos importantes combustibles fósiles, las energías renovables florecen en praderas, campos y bosques, asegura Klöckner.

La ambiciosa estrategia que su ministerio, junto con el ministerio alemán de investigación han diseñado, se basa en dos principios básicos: mientras la estrategia se centra mucho en la biotecnología y en la investigación, también está previsto que se pongan a disposición de la industria más materiales y materias primas biogénicas. Algunos de los materiales básicos para los productos “bio” son, por ejemplo, plantas, microorganismos, algas o hongos.

No obstante, la renovada estrategia alemana de bioeconomía no es un caso aislado: cerca de 60 países han desarrollado este tipo de estrategias en todo el mundo, con el objetivo de que sus economías sean más sustentables y circulares.

Para la ministra alemana de Investigación, Anja Karliczek, esto se traduce en claras oportunidades económicas, ya que una economía sostenible garantiza a Alemania “una posición líder en los mercados en el futuro a largo plazo”.

La estrategia no aborda la PAC

A pesar de que los expertos han alabado la estrategia porque, aseguran, tiene amplitud de miras, sigue siendo fuertemente criticada. En una detallada evaluación de la estrategia, el Sindicato alemán de la Naturaleza y la Biodiversidad (Nabu) la ha criticado por, aseguran, centrarse en exceso en la biología y omitir los aspectos sociales. “No obstante, el desarrollo sostenible también necesita cambios culturales, económicos e institucionales, los cuales no se producirán sin resistencia y conflicto”, advierten numerosos activistas climáticos.

La organización ambientalista también la ha criticado por, según lamenta, simplemente ignorar la Política Agrícola Común (PAC). No obstante, en la Estrategia de Bioeconomía de la Unión Europea (UE), que presentó la Comisión Europea en 2018, y que mejora la condiciones de vida de agricultores y pescadores, sí se menciona como uno de los objetivos, el cual, por otro lado, también figura como una de las nueve principales metas de la PAC.

No obstante, ni la PAC ni sus otros objetivos, entre ellas la reestructuración de las cadenas alimentarias, la conservación de los paisajes o el garantizar una alimentación saludable, se mencionan en la estrategia de bioeconomía de Alemania.

La organización Nabu ha criticado que la estrategia se centre en exceso en la optimización digital, y que se focalice demasiado, asegura, en la tecnología y en la optimización de plantas individuales.

¿Bioeconomía versus producción alimentaria?

No obstante, la oposición asegura justo lo contrario. El Partido Democrático Libre (FDP) considera que a la estrategia no sólo le faltan objetivos definidos y evaluables sino también “un compromiso positivo con las oportunidades de la ingeniería genética” para la agricultura.

El FDP sugirió que para que Alemania pueda beneficiarse plenamente de las oportunidades que ofrece la bioeconomía, la Ley alemana de Ingeniería Genética tendría que reformarse y adaptarse a los nuevos métodos de cultivo, según ha explicado el portavoz de política tecnológica del grupo parlamentario del FDP, Mario Brandenburg. De hecho su partido ha presentado una moción en ese sentido ante el Parlamento germano (Bundestag).

La pregunta que se hacen los expertos es: ¿hasta qué punto la bioeconomía contribuye, y hasta qué punto resulta dañiña para la producción alimentaria sostenible? Después de todo, el cultivo a gran escala de materiales regeneradores para la economía también se traduce en menos espacio para la producción de alimentos en los campos.

Para debatir sobre esas limitaciones y objetivos conflictivos de la bioeconomía, la estrategia también contempla un refuerzo del Consejo de Bioeconomía del Gobierno alemán. Representantes de la industria y de la sociedad debatirán, entre otros temas, cómo puede la bioeconomía garantizar la seguridad alimentaria.

No obstante, este dilema no puede resolverse sólo con nueva tecnología, como sugirió el director gerente de Nabu, Leif Miller. Se trata de un objetivo prioritario ya que “la transformación de la economía sólo se podrá conseguir si consumimos menos”, subrayó.

 

Secciones : Agricultura