Así lo apunta un estudio titulado "Seniors, la generación futura y presente", divulgado por la consultora Kantar y que cifra en 4.271 euros al año el desembolso destinado por los hogares de este tipo a llenar la despensa.
"Los mayores de 65 años son y serán el público objetivo más importante para el sector del gran consumo", han destacado los autores del informe. Su gasto medio es 172 euros superior al de los menores de esa edad.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), actualmente, en torno a un 18,5 % de la población española tiene más de 65 años -unos 8,3 millones de personas-, porcentaje que se aproximaría al 25 % en 2030. Desde Kantar han incidido en que los consumidores "seniors" gastan más que la media en productos de alimentación, bebidas, droguería y perfumería" que el resto de segmentos.
"Un mercado de productos tan básicos como el del gran consumo sólo puede crecer con la población, así que teniendo en cuenta que es el único público objetivo que subirá, el crecimiento del mercado dependerá de estos hogares, y de hecho eso ya es así actualmente", ha defendido el director de Servicio a Clientes de Kantar, Carlos Cotos.

Entender los hábitos e compra de los mayores de 65

En su opinión, los mayores de 65 años mejorarán cada vez más su calidad y esperanza de vida, por lo que será "clave" para el futuro de la distribución "entender cómo evolucionan sus hábitos de compra". En este sentido, desde la consultora han revelado que las cestas de la compra de este tipo de población son más pequeñas y más frecuentes, incluyen envases y formatos de menor tamaño, más marcas de fabricante y menos productos en promoción, además de priorizar las tiendas de proximidad y los alimentos que beneficien a su salud.
Los expertos de Kantar han considerado que los patrones de consumo entre los 50 y los 64 años "se asemejan más a la población más joven".
De acuerdo con el estudio, existen tres perfiles de hogares "seniors":

• El "abuelo para todo" que compra productos para "gustar cuando les visitan" y "agasajar" a la familia;
• El "tradicional", con un estilo más ahorrador y sensible al precio;
•  El "siempre joven", conectado, ocupado e impulsivo y cuyo estilo de vida es similar al de hogares más jóvenes.