Mujeres de la pesca. La armadora María José de Pazo, gerente de Veraguas, con sede en Marín (Pontevedra). Foto: Cedida por María José de Pazo

La armadora María José de Pazo, gerente de Veraguas, con sede en Marín (Pontevedra). Foto: Cedida por María José de Pazo

Un 33 % del empleo del sector

Mujeres de la pesca, un tercio que pide visibilidad y conciliación

Publicado por: agro 8 de marzo de 2018 Fuente: EFEAGRO

Las mujeres de la pesca representan un 33 % del empleo del sector. En los últimos años han ganado reconocimiento, en un ámbito tradicionalmente de hombres. Pero insisten en que queda mucho camino por conquistar, en aspectos como el embarque o la conciliación.

Las mujeres de la pesca consideran que en los últimos 10 o 20 años han ganado reconocimiento en un ámbito muy masculino, pero insisten en que aún es insuficiente.
“Una de cada tres personas que trabaja en la pesca es una mujer”, ha recordado la ministra de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, en referencia a las 45.000 féminas empleadas en la actividad extractiva, el marisqueo, la acuicultura, la industria u otros subsectores vinculados al mar.
De ellas, 9.641 pertenecen al Régimen Especial del Mar de la Seguridad Social, un 16 % de los afiliados.
En las pescaderías despachan 10.800 mujeres, el 52,7 % de los empleados de estos comercios, según la Federación Española de Detallistas de Pescado (Fedepesca).

Progresos en tierra

El  trabajo de la mujer ha contribuido tradicionalmente al sustento de las familias del mar, pero ha salido a la luz en poco más de dos décadas, según varias fuentes consultadas por Efeagro.

La patronal de armadores Cepesca y la Federación Nacional de Cofradías Pesqueras (FNCP) afirman que en los cargos directivos y administrativos el progreso es claro y hay integración.
La secretaria general adjunta de Cepesca, Rocío Béjar, subraya el “crecimiento” del asociacionismo y del “peso” de la representatividad femenina.
A su juicio, la “asignatura pendiente” es enrolar mujeres como tripulantes de pesqueros, por dificultades como la adaptación de las embarcaciones.
La secretaria general adjunta de la FNCP, Estefanía Sánchez-Escribano, explica que en los órganos de representación de las cofradías no hubo mujeres hasta 1999.
“Necesitamos mejorar el papel de la mujer, debemos insistir en la formación para las que deseen participar en actividades de gestión e incrementar su presencia en puestos de dirección”, ha afirmado.

Brecha salarial y difícil conciliación

Pescadoras del Atlántico o del Mediterráneo confirman una evolución positiva, aunque admiten que persisten la brecha salarial y los problemas de conciliación, según la gerente de Veraguas (Pontevedra), María José de Pazo, y la vicepresidenta de la Cofradía de Pescadores de Málaga, Mari Carmen Navas.
María José de Pazo y su hermana gestionan su empresa, propietaria de barcos que faenan en Marruecos o Mauritania, y que también opera en el Puerto de Cádiz.
De Pazo conoce las relaciones laborales y la contratación de marineros en esos países, donde la situación femenina es muy diferente y en los que, asegura, se ha desenvuelto bien “salvo en casos excepcionales”.

Mujeres de la pesca. María José de Pazo, gerente de Veraguas, en la lonja de Cádiz. Foto: Cedida por María José de Pazo
Mujeres de la pesca. María José de Pazo, gerente de Veraguas, en la lonja de Cádiz. Foto: Cedida por María José de Pazo

 

Apunta que hace unos 20 años, en Galicia, llegó a un banco a pedir financiación y le preguntaron por su marido o por su padre.
Nota una diferencia “abismal” entre Andalucía y el norte en el número de mujeres en las lonjas, muy pocas en el primer caso.
Insiste en que su profesión pone difícil la conciliación “para cuidar hijos o padres”, por los horarios o la disponibilidad “de 24 horas, en caso de avería de un barco”.
“La Administración tiene que tomar parte o las mujeres solas no podremos”.

Guarderías en los puertos

De Pazo y la patrona mayor de la cofradía de Vélez-Málaga, Mari Carmen Navas, afirman que abrir guarderías en los puertos sería una buena solución, así como incentivos y bonificaciones para las empresas que contraten y enrolen mujeres.

Mujeres de la pesca. Mariscadoras trabajando expuestas al sol. EFE/Archivo. Salvador Sas
Mujeres de la pesca. Mariscadoras trabajando expuestas al sol. EFE/Archivo. Salvador Sas

Navas, hija y nieta de pescadores, recuerda que en 2010, cuando accedió por primera vez a la junta general de su cofradía, encontró “presiones” masculinas que le llevaron a dejar el puesto.
La situación ha cambiado, según Navas, casada con un pescador y quien reconoce que la colaboración conyugal le ha permitido ejercer su actividad, en una empresa pequeña.
En otras generaciones, señala, los pescadores enseñaban a faenar solo a sus hijos varones: “Yo sí puedo enseñar a mi hija”.

Secciones : Pesca