Oleoturismo, una original forma de hacer turismo en la que se dan cita ingredientes como gastronomía, naturaleza o técnicas tradicionales de agricultura. Se trata de un recorrido por el trabajo artesanal de la cosecha de la aceituna y la elaboración del aceite de oliva en distintos puntos de la península ibérica.

Basilippo -Carmona, Sevilla-

El Centro Cultural del Olivo de Basilippo, ubicado en Carmona -Sevilla-, es, en palabras de su portavoz, Isaac Martín, “uno de los espacios pioneros en España en la difusión de la cultura del aceite de oliva virgen extra, el olivo y la dieta mediterránea”.

Se trata de una oleícola sevillana de carácter familiar que acumula ya más de diez años ofreciendo visitas guiadas a clientes procedentes de Estados Unidos o Malasia, cursos de formación o jornadas para niños y universitarios, con más de 50.000 turistas de todo el mundo.

“Basilippo es uno de los espacios pioneros en España en la difusión de la cultura del aceite de oliva virgen extra, el olivo y la dieta mediterránea”

Se organizan visitas a la finca, la almazara, el olivar o el museo -en el que se muestran las antiguas técnicas de producción y se comparan con los sistemas actuales de extracción en frío-. También se desarrollan talleres de cata, una experiencia sensorial en la que descubrir los diferentes aromas y sabores de este producto.

Según explica Martín a Efeagro, el epicentro de Basilippo es “la hacienda familiar de finales del siglo XVIII” en la que se cultivan más de 6.000 olivos “de la variedad arbequina”. Además, disponen de su propia almazara, bodega, área de envasado y tienda. Todas las actividades que se ofrecen están basadas en la “calidad, cercanía y pasión por el olivo” porque, según indica, el aceite de oliva virgen extra “es cultura” y debe ser trasmitida.

Empordàlia -Gerona-

Si viajamos hasta el norte, en Gerona, encontramos otra atractiva propuesta oleoturística: las visitas guiadas de Empordàlia. Situada en Empordà, Gerona, esta cooperativa trabaja más de 500 hectáreas de olivos centenarios y ofrece paquetes turísticos que consisten en visitar el molino de aceite y hacer entender al turista cómo se elabora este producto tan típico de la zona, con el foco puesto en dos variedades autóctonas: Argudell y Coribell, explican fuentes de la orgnización.

También se visita el antiguo molino de aceite -donde se expone una máquina de los años 20 procedente de Córdoba- y se da a conocer la historia de las diferentes herramientas de producción.

“Los paquetes consisten en visitar el molino de aceite y hacer entender al turista cómo se elabora este producto tan típico de la zona”

Asimismo, se ofrece la posibilidad de recorrer los olivares, la mayoría centenarios y, tras ello, disfrutar de una cata de El Oli de Pau de oliva extra virgen -elaborado por Empordàlia- acompañada de una explicación sobre las características del mismo.

Empordàlia cuenta además con un amplio programa de experiencias de temporada, como la que se realiza en noviembre, en pleno mes de la cosecha: la actividad “Hazte el aceite". Se trata de una propuesta con la que se recorren los olivares, se recogen las aceitunas de manera tradicional y se conoce, de primera mano, cómo se elabora el producto mientras se degusta un desayuno mediterráneo. Además, se organizan numerosos cursos de cocina en los que el aceite es el principal protagonista.

Cortijo Spiritu Santo -Úbeda, Jaén-

La tercera parada nos lleva hasta Úbeda, un destino en el que disfrutar de una original experiencia en el Cortijo Spiritu Santo. Se trata de una almazara familiar -en la que controlan desde el fruto hasta el envasado final- que organiza actividades de oleoturismo con alojamiento incluido, explican fuentes del alojamiento.

Cuentan con una casa-cortijo del S.XVI, rehabilitada y convertida en casa rural en la que pasar unos días de descanso y desde la que disfrutar de magníficas vistas de Úbeda, Baeza, la Sierra de Magina y todo el valle del Guadalquivir. La experiencia, además de alojamiento, incluye visita al olivar y a la almazara.

“En España hay muy poca cultura del aceite, a pesar de ser el principal productor del mundo”

En la visita a la finca, en la que se practica la agroecología, se puede recorrer el olivar y observar numerosas especies de flora y fauna autóctona, así como un particular bosque de olivos. Aquí, se dan a conocer algunas de las variedades de olivo presentes en la finca, el uso y aprovechamiento del suelo y las labores de cultivo que se estén realizando.

Además del paseo entre olivos, se hace un recorrido por las distintas partes de la almazara explicando todo el proceso de elaboración y se disfruta de una cata de aceites en la que se enseña a diferenciar un virgen extra de otras categorías comerciales que hay en el mercado.

La propuesta se completa con visitas guiadas a Úbeda y Baeza, ciudades Patrimonio de la Humanidad, en las que se recorren las calles y monumentos más emblemáticos de ambas localidades.

En tierras portuguesas

En la vecina Portugal se extienden paisajes diseñados por extensiones de olivos de los que se obtiene un aceite de aroma afrutado, color dorado o amarillo verdoso, amargo, picante o más dulzón, de sabor suave o intenso. Para conocer más sobre este producto, proponemos descubrir seis regiones que cuentan con Denominación de Origen Protegida en la producción de aceite de oliva: Tras-os-Montes, Beira Interior, Ribatejo, Moura, Alentejo Interior y Norte Alentejano. En todas ellas se puede disfrutar de un recorrido gastronómico que recomendamos empezar en Alentejo -la región que más aceite de oliva produce en el país-.

Por ejemplo, Quality Tours ofrece visitas guiadas y tours especializados para conocer todos los secretos del aceite portugués. Otra opción es apostar por el turismo y las catas, de la mano de Oliva&Co, que organiza degustaciones de aceite, visitas a olivares, molinos, museos del aceite, talleres o cursos, entre otras cosas.

También, el hotel Vintage House Douro, a orillas del Duero, ofrece a sus clientes cursos de degustación de productos gourmet, entre los que no podía faltar la cata de aceites de la región.

En Alentejo, el establecimiento Herdade da Malhadinha Nova Spa, rodeado de viñedos y olivos, diseña experiencias turísticas para que sus huéspedes descubran los atractivos de los aceites alentejanos. Por último, la empresa Esporão ofrece visitas para conocer el proceso de producción del aceite.