La especialista en agricultura y en la Unión Europea (UE) ha presentado la "guía práctica" de la nueva PAC de Editorial Agrícola, que da a conocer las novedades del periodo 2023-2027.

La guía elaborada por Herranz explica los pilares de la nueva política agraria, las condiciones que deben cumplir los agricultores para cobrar las ayudas, el tipo de subvenciones, el plan de aplicación en España y los ecoesquemas, ligados a las prácticas sostenibles ambientales, junto a otros asuntos.

"Creo que esta reforma llega en el peor momento posible", con la crisis económica y la subida de los precios de los alimentos, la menor producción de alimentos y la inestabilidad internacional, ha asegurado quien fuera diputada de la Eurocámara entre 2002 y 2019.

La experta ha señalado que "las condiciones han cambiado tanto en los últimos tiempos que esta reforma, necesaria para ser responsable con el medioambiente, choca con la reducción de la producción alimentaria, el abandono de tierras o los ceses de productividad".

A pesar de todas las presiones internacionales, Herranz ha destacado que no se ha cambiado el nuevo paradigma de la PAC, inspirado -a su juicio- por el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans, y marcado por la orientación hacia el desarrollo sostenible.

Atrás queda el "interés en asegurar alimentos de calidad a precios razonables para todos los consumidores europeos" que existía con el anterior modelo de ayudas, ha afirmado la experta, para quien los Estados miembros de la UE pasan ahora a tener más poder para decidir su política agraria.

Ante la publicación a finales del año pasado de las últimas normas de adaptación en España de la nueva PAC, Herranz ha justificado que diversas comunidades autónomas hayan optado por derogar en 2023 algunos puntos para no perjudicar a los productores, que han tenido que tomar antes "decisiones estratégicas en sus explotaciones".

En su opinión, las estrategias de la Comisión Europea "De la granja a la mesa" y de Biodiversidad, y el Pacto Verde Europeo obligan a la agricultura europea a adaptarse a la sostenibilidad después de llevar décadas haciéndolo.

"Los ecorregímenes (o ecoesquemas) estaban pensados para potenciar lo que venían haciendo los agricultores y que nunca se había reconocido como buenas prácticas, pero se ha transformado en una exigencia más en vez de un reconocimiento", ha destacado Herranz.

En la conferencia, la abogada agraria Celia Miravalles ha detallado los requisitos que deben cumplir los productores para ser considerados agricultores activos y poder cobrar las ayudas, así como los cambios introducidos en la cesión de derechos, las penalizaciones y otros aspectos de la nueva PAC.

También han participado productores y representantes de compañías de piensos, aseguradoras y maquinaria agrícola, entre otros.