Con 25.687,7 millones de euros, la renta agraria incrementó un 6,9 % respecto a 2015, según la última estimación difundida por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente. El dato supone una mejora en comparación con los cálculos publicados en diciembre.
El Mapama avanzó en diciembre una primera estimación en la que estimaba un repunte del +5,1 % de la renta agraria, ya que sus cálculos eran, en términos corrientes, de 25.254,9 millones de euros para 2016.
En la serie histórica de esta macromagnitud, con datos anuales desde 1990 hasta 2016, adjudica a 2003 la mayor renta agraria (26.323,9 millones).
Le siguen 2007 (26.149,9 millones) y 2016, que se sitúa cerca de la de 2004 (25.422,8 millones).
El Mapama, a partir de los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), ha cifrado en 30.871,1 euros la renta agraria en términos corrientes por UTA (Unidad de Trabajo Año). Esto supone un ascenso del +5,1 % respecto a 2015.

El repunte del volumen de trabajo expresado en UTA durante 2016 fue del +1,6 % (832.100 UTA).
A precios constantes, la renta agraria por UTA se elevó un +4,4 % (14.976,9 euros) respecto a 2015, la segunda más alta desde 1990, ya que tan solo fue superada por la registrada en 2003 (15.160,1 euros).
La renta agraria mide el valor generado por la actividad de la producción, es decir, la remuneración de todos los factores (tierra, capital y trabajo).
Diferencias entre renta animal y vegetal
Esta segunda estimación para 2016 presenta un aumento del +2,9 % en valor para la rama de actividad agraria a precios básicos.
La producción vegetal creció un +4,4 % en valor, fundamentalmente por el alza de las cantidades producidas (+8,4 %) como aceite de oliva, plantas industriales, cereales, plantas forrajeras, hortalizas, vino y mosto; los precios medios cayeron, sin embargo, un -3,7 %.
El valor de la producción animal creció el +0,7 % por el aumento también de las cantidades producidas (+4,5 %) -entre ellas el Mapama destaca, por este orden, huevos, aves, porcino, equino, ovino-caprino, bovino y leche; en contraste, los precios cayeron un -3,6 %.
En relación a los productos intermedios, las cuentas reflejan un descenso del -0,9 % en valor, frente a una subida del +2,9 % de las cantidades consumidas y un descenso de los precios del -3,7 %.
Agricultura ha percibido un mayor volumen en servicios de intermediación financiera, fitosanitarios, piensos, gastos veterinarios, semillas y plantones y energía, así como un descenso en el de fertilizantes de hasta el -7,9 %.
Precios
En cuanto a precios pagados por productos intermedios, el documento constata incrementos en semillas, plantones, gastos veterinarios y productos fitosanitarios y bajadas en energía, fertilizantes, piensos, servicios agrarios y otros bienes y servicios.
En subvenciones, el Mapama ha fijado para 2016 un repunte del +2,3 %, hasta los 6.598,2 millones de euros, lo que representa el 25,7 % de la renta agraria de 2016.
Esta cifra se desglosa en 793,5 millones de euros de “subvenciones a los productos” (491,8 millones de euros a productos animales y 301,7 a productos vegetales) y 5.804,7 millones de euros en “otras subvenciones” como las ayudas por retirada de tierras o por medidas agroambientales.