Bolivia ha eliminado el arancel a la importación de trigo, con el fin de favorecer su entrada en el país para elaborar harina y pan de modo que esté abastecido el mercado interno ante la emergencia por coronavirus.
El arancel cero para este cereal por al menos dos años es una de las últimas medidas por decreto de la presidenta interina del país, Jeanine Áñez, para afrontar la situación por la COVID-19 en Bolivia, donde está declarado estado de emergencia sanitaria con 18 fallecidos y 264 casos confirmados.
El ministro interino de Presidencia, Yerko Núñez, dijo al explicar estas medidas ante los medios en La Paz que la prioridad es salvar vidas ante la pandemia por coronavirus, pues ya “habrá tiempo para recuperar la economía” ante esta crisis.
Núñez expresó la disposición del Gobierno interino del país a que si es necesario “quebrar la alcancía para cuidar la vida” lo hará.
Cuidar la vida
La decisión del Ejecutivo transitorio de Áñez llega en un momento en que desde distintos sectores se cuestiona la forma en que aplica la cuarentena decretada en el país, con críticas de que algunas medidas perjudican a sectores desfavorecidos con dificultad para acceder a productos básicos.

Por su parte, la Empresa de Apoyo de Producción de Alimentos (EMAPA) anunció que pagará 330 dólares por tonelada de trigo en la campaña agrícola de invierno, a fin de incentivar la producción.
Apoyo al cultivo
La empresa estatal espera apoyar el cultivo de unas 64.450 hectáreas, con una producción de cerca de 116.930 toneladas, mediante la distribución de insumos como semilla, defensivos agrícolas y diésel, la asistencia técnica, y el seguimiento y capacitación al pequeño productor de trigo.
La semilla certificada será subvencionada hasta en un 15 por ciento para el pequeño productor y está previsto ampliar el parque automotor, laboratorios de suelos, drones y otro equipamiento para mejorar el seguimiento, asistencia técnica, capacitación y trabajo de campo de los técnicos de la empresa estatal, según un comunicado de EMAPA.
Otro de los objetivos es implementar centros de acopio en plantas propias de EMAPA, además de silos privados para almacenar este cereal.