El Congreso de los Diputados ha convalidado el Decreto-Ley que completa el proceso de transposición de la directiva comunitaria sobre tabaco, y que afecta sobre todo a los cigarrillos electrónicos y prohíbe el tabaco de uso oral.
Dicho Decreto Ley ha sido convalidado en su votación por la mayoría de los diputados (332 síes, un no y una abstención), pero no ha contando con el respaldo para su tramitación por el procedimiento de urgencia.
Esta normativa es el resultado de la transposición a la legislación española del 5 % que quedaba pendiente por trasladar a la legislación española de la directiva comunitaria sobre fabricación, presentación y venta de productos del tabaco y otros relacionados.
El 95 % de la normativa europea ya se encontraba en la legislación española desde el pasado mes de junio, cuando el Gobierno aprobó el Real Decreto 579/2017.
La nueva regulación del sector del tabaco en España prohíbe la comercialización de labores con vitaminas, cafeína, taurina y otros estimulantes, y obliga a los fabricantes e importadores de tabaco a comunicar los ingredientes y los niveles de emisiones de cada producto.
También introduce el registro de los fabricantes, importadores y distribuidores de productos relacionados con el tabaco “para tener un mejor control del mercado”.
El cigarrillo electrónico, protagonista
El Decreto-Ley que ha recibido luz verde en el Parlametno modifica la famosa normativa “Antitabaco” de 2005, y entre los cambios introducidos destaca la equiparación de los cigarrillos electrónicos con los productos del tabaco a la hora de hacer publicidad, promoción o patrocinios.
El sector del cigarrillo electrónico trabaja ya en adaptarse a los últimos cambios introducidos en la legislación que regula su actividad, y su próximo objetivo es convencer al Gobierno español de ser incluido en los planes de prevención del tabaquismo.

Así lo ha avanzado en declaraciones a Efeagro el presidente de la Unión de Promotores y Empresarios del Vapeo (UPEV), Arturo Ribes, quien ha considerado que esta regulación supone “un antes y un después” para esta industria.
“Hasta ahora no había ningún tipo de regulación y ahora lo tenemos, y eso es positivo. Aunque también abre una dura etapa de adaptación para las empresas del sector”, ha explicado Ribes.
Ayuda contra el tabaquismo
En su opinión, la normativa ayudará a garantizar la calidad y seguridad de los productos colocados a la venta, aunque al mismo tiempo España ha optado por un modelo “que conlleva una carga administrativa muy pesada para el crecimiento del sector“.
“Una vez ya aprobada, nuestro panorama de trabajo cambia por completo. Creemos que el Gobierno tiene una asignatura pendiente a la hora de iniciar una política de reducción de daños por tabaquismo, como han hecho Reino Unido o Francia, y han incluido el cigarrillo electrónico dentro de estos planes de prevención“, ha aseverado Ribes.
El presidente de la UPEV ha calificado este objetivo de “prioritario” para la asociación, que representa los intereses de un sector formado en España por una veintena de empresas productoras e importadoras -de hardware y líquidos- y en torno a 330 puntos de venta, de acuerdo con sus cálculos.