El Gobierno ha asegurado que respaldará los intereses de las conserveras en las negociaciones de acuerdos de libre comercio entre la Unión Europea (UE) y los países del sureste asiático. Hay preocupación en el sector español por la competencia de las importaciones.
El Ejecutivo “ha transmitido y transmitirá” a la Comisión Europea (CE) la importancia que “reviste” el sector de conservas pesqueras para España, “primer productor comunitario de transformados de productos de la pesca”, según ha asegurado en una respuesta parlamentaria.
El Gobierno ha contestado así a una pregunta de la diputada Olaia Fernández Dávila (BNG) sobre los problemas de las conserveras debido a las importaciones de países terceros, que en muchos casos entran exentas del pago de aranceles. Este problema impacta especialmente en las ventas españolas de latas de atún y preocupa a las industrias.
De manera específica, se ha referido en el texto de la respuesta a Filipinas. Ha señalado que si se probara que no cumple los requisitos para evitar la pesca ilegal, la CE actuaría “en consecuencia”.
En ese sentido, ha aludido a la regulación comunitaria, por la cual hace poco la CE ha amenazado a Tailandia con vetar sus importaciones si no combate prácticas ilícitas en la extracción y comercio de pesca.

Además, ha recordado que Filipinas está catalogada como nación en desarrollo y, por tanto, beneficiario del régimen de Sistema de Preferencias Generalizadas (SPG).
A través del SPG, la UE ofrece un acceso ventajoso, con exenciones parciales o totales de aranceles, para los productos de países en desarrollo con el fin de reducir su pobreza, garantizar los derechos humanos y laborales y promover su desarrollo sostenible.
No obstante, el Ejecutivo ha señalado que si Filipinas incumpliera sus compromisos en la aplicación de los convenios laborales o normas de origen, se le retirarán los compromisos arancelarios.
Siguen las quejas del sector
Por otro lado, sigue el enfrentamiento entre la flota española, representada por la Confederación Española de Pesca (Cepesca), y la patronal conservera Anfaco sobre las demandas relativas a la importación de lomos de atún como materia prima para transformar en territorio español o comunitario.
Mientras las industrias quieren un cupo suficiente de entrada de lomos de atún que les permita el suministro a sus fábricas, Cepesca ha vuelto a solicitar que se elimine la cuota de 22.000 toneladas de este producto específico que entra de Asia sin aranceles, porque una gran parte procede de Tailandia.
En relación a este país, los armadores han recordado que ha sido amonestado por Bruselas por prácticas ilegales y denunciado por varios organismos por prácticas de esclavitud a bordo de sus buques”.