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Los grupos europarlamentarios del Partido Popular Europeo, por un lado, y de los socialdemócratas y verdes, por otro, intercambiaron acusaciones cruzadas este martes en la Eurocámara a cuenta de la apropiación de las demandas de las protestas agrícolas en Europa, después de que los populares se autodenominaran "el partido de los agricultores".
Con el telón de fondo de las manifestaciones del sector agroalimentario en varias ciudades europeas, incluyendo frente al Parlamento Europeo en Estrasburgo, y después de que la Comisión Europea anunciara hoy que retirará una polémica propuesta para reducir el uso y riesgo de los pesticidas, los grupos europarlamentarios preparan ya el camino hacia unas elecciones europeas en las que estas demandas van a tener un papel protagonista.
"No odian el medio ambiente. Aman la naturaleza y trabajan cada día con su ganado. Nuestros agricultores no son lobistas, sino que mantienen nuestras zonas rurales. Todos los agricultores pueden estar seguros de que tienen un futuro (...), seremos el partido de los agricultores y estamos de su lado", dijo el jefe del grupo popular en la Eurocámara, el alemán Manfred Weber.
Weber insistió en que los agricultores "son ciudadanos" que "no quieren una ideología de izquierdas" sino "que se les tome en serio" y políticas adecuadas, al tiempo que celebró la retirada de la propuesta sobre uso sostenible de pesticidas y que se rebajase la propuesta original para la ley de la restauración de la naturaleza, una de las normas más polémicas de la legislatura.
En una rueda de prensa posterior, la jefa del grupo socialdemócrata en la Eurocámara, Iratxe García, criticó que se haya convertido al sector en una "lanza electoral" y pidió a sus rivales políticos que hagan política y no campaña para las elecciones al Parlamento Europeo del 6 al 9 de junio.
"Lo que no es de recibo es esta pugna entre la derecha y la extrema derecha por ver quién representa al sector agrícola y ganadero de Europa, que es tan diverso como la UE. Nadie tiene el derecho para arrobarse la representatividad del sector", incidió García, que pidió escuchar a los agricultores y poner en marcha ayudas directas y simplificar la burocracia que enfrenta el sector.
Uno de los líderes del grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea en la Eurocámara, el belga Philippe Lamberts, criticó por su parte que los populares hayan votado a favor de los acuerdos comerciales con países terceros que parte del sector agrícola considera problemáticos para su competitividad y, al mismo tiempo, culpen de las dificultades de los agricultores a las políticas medioambientales europeas.
"Han estado fastidiando al campo y ahora se erigen como sus salvadores, y eso es directamente mentira", advirtió Lamberts, que señaló que no se puede al mismo tiempo preocuparse por los intereses de los agricultores y por los de las grandes empresas agroalimentarias.
"¿Es cierto que llevar el Pacto Verde a la agricultura requerirá más restricciones y urgencia al cambio? Sí, totalmente. Y por eso no podemos hacerlo de manera burocrática y sin escuchar a los expertos, y los primeros son los propios agricultores. Y no puedes hacerlo sin cambiar el sistema económico", concluyó.
La líder del grupo liberal Renovar Europa, Valérie Hayer, dijo también que "Europa tiene un deber hacia los que nos alimentan" y criticó que "los populistas se hayan subido al barco como siempre" para apropiarse de sus demandas, al tiempo que les cuestionó "dónde está su apoyo" a las zonas rurales que, dicen, Europa está ignorando.
