La mitad de los alimentos frescos desperdiciados en el súper acaba en la basura

Gráfico con los datos divulgados por Nielsen sobre el desperdicio alimentario de frescos en los supermercados españoles. EFEAGRO/Miguel Mulas

DESPERDICIO ALIMENTARIO

La mitad de los frescos desperdiciados en el súper acaban en la basura

Publicado por: EFEAGRO 14 de marzo de 2018

Los supermercados españoles desperdician en torno a 128 millones de kilos de alimentos frescos al año, de los cuáles casi la mitad va a parar a la basura, según los datos de un estudio de la consultora Nielsen publicado hoy.

El informe cuantifica en cerca de 484 millones de euros el desperdicio de este tipo de alimentos -frutas y verduras, carne y pescado fresco-, lo que equivale al 3 % de todas las ventas de esta clase de productos en las cadenas de distribución.

De estos “residuos” -en los que se incluyen alimentos con daños estéticos pero aptos para el consumo o aquellos cuya fecha de caducidad es próxima-, el 49 % terminó en la basura, el 27 % se “recicló” y un 24 % fue donado a instituciones sociales.

La responsable del estudio, la consultora de Nielsen Carmen Hernández, ha recordado que reducir el desperdicio en el ámbito del fresco es especialmente difícil, ya que se trata de productos que caducan en poco tiempo y cuya conservación exige un control riguroso para evitar riesgos sanitarios.

Además, ha señalado que la distribución es el eslabón de la cadena donde menos desperdicio se observa, al representar un 5 % del total, según datos oficiales.

Sin embargo, es un sector donde sí existe margen para mejorar debido a su carácter “centralizado”, al contrario que en otros donde puede ser más complejo, como el hogar o los bares tradicionales.

Diferencias por categoría

El desperdicio medio en el súper es más elevado en el caso del pescado (representa el 5,5 % de las ventas totales) que en el de la carne (2,7 %) y las frutas y verduras (3,2 %), de acuerdo con el documento.

En este último caso, la mayor parte del residuo se genera por la manipulación del genero por parte del cliente.

Los responsables del informe diferencian dentro de este desperdicio alimentario tres tipos: los productos aptos para el consumo pero no para la venta -con daños estéticos, por ejemplo-, las referencias próximas a caducar o superar la fecha de referencia, y los ya caducados o pasada su fecha de referencia.

Varios voluntarios preparan alimentos. Foto: EFE/Kiko Huesca
Un grupo de alimentos en un lineal. Foto: EFE/Kiko Huesca

Hernández ha apuntado que una alternativa útil al desperdicio a la que se recurre cada vez más es la “microdonación” a entidades locales, muy cercanas al punto de venta y a las que se entregan pequeñas cantidades de producto fresco para que se redistribuya con celeridad, en contraste con la donación a los bancos de alimentos, centradas en la alimentación envasada.

Otras opciones que ya se ponen en práctica son derivar una parte de estos “residuos” a la producción de comida para animales, la fabricación de otros alimentos -como en el caso de la fruta y la mermelada-, la producción de biogás o compost, o su destino a la industria farmacéutica y cosmética.

Margen de mejora

El estudio, elaborado en base a las respuestas de más de 2.000 profesionales del sector, refleja que en primavera-verano el desperdicio aumenta por las mayores temperaturas, y resalta que ofrecer género en su justo punto de maduración supone una “problemática añadida”.

Desde Nielsen se ha resaltado que el sector de la distribución “demuestra avances en la reducción del desperdicio alimentario que genera, aunque todavía queda mucho camino por recorrer“.

De hecho, el 38 % de los participantes en el informe reconoció que la cadena para la que trabaja todavía no cuenta con un sistema de gestión específico para estos residuos.

El estudio ha sido patrocinado por la empresa de soluciones tecnológicas para el comercio Checkpoint, cuyo director general para España y Portugal, David Pérez, ha defendido el uso de sistemas de radiofrecuencia e identificación (RFID) para avisar de los productos cuya caducidad está próxima y contribuir así a reducir el desperdicio.

Secciones : Empresas