Las informaciones apuntaban a la aprobación de la venta de carne de ternera de animales con tuberculosis bovina. El Gobierno asturiano y las organizaciones agrarias las han desmentido.
Las acusaciones surgieron tras una reunión entre la diputada Paula Valero y el portavoz de los ganaderos de Colunga, Gaspar Luis Costales, quienes habían asegurado que la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales de Asturias aprobaba la venta de ternera que había dado positivo en tuberculosis bovina.
La Consejería reaccionó el pasado miércoles garantizando que la carne comercializada por los mataderos asturianos cumple con todas las exigencias sanitarias exigidas para su consumo, además de señalar que es “radicalmente falso” que se vendan partidas procedentes de animales afectados por tuberculosis.
En un comunicado “ante la alarma social que pudiera crearse” el Gobierno señaló que los servicios veterinarios oficiales de los mataderos asturianos se ajustan “escrupulosamente” a los procedimientos de inspección establecidos en la normativa nacional y europea y a los protocolos de la Dirección General de Salud Pública.
Las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA desmintieron también que se esté comercializando carne de reses afectadas por la tuberculosis bovina, tras reunirse con la consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales de Asturias, María Jesús Álvarez.
La propia consejera mandó un mensaje de confianza a los consumidores y dejó claro que el sistema de saneamiento ganadero asturiano “siempre ha sido uno de los mejores de España” y que “los niveles de prevalencia de las enfermedades son muy bajos”.