No hay vacaciones para el hambre. Banco de Alimentos ha presentado en Barcelona una campaña para concienciar sobre las necesidades en julio y agosto, cuando las donaciones bajan casi a la mitad.
La Fundación Banco de Alimentos ha presentado la campaña 'La Fam no fa vacances' (El hambre no se va de vacaciones), con la que pretende recoger suficientes alimentos básicos para poder atender a las personas necesitadas en verano.
"El objetivo es tocar el corazón de las personas que pueden ofrecer alimentos a quienes los necesitan", ha señalado el secretario de la Federación Catalana de Bancos de Alimentos, Eduard Arruga, que ha destacado que para ello la movilización se hace a través de entidades que organizan actividades.
En este sentido, Arruga ha opuesto énfasis en que lo que se pide son "alimentos, no otra cosa", preferiblemente productos básicos como aceite, legumbres, leche, conservas de pescado, alimentos infantiles y galletas, que normalmente no forman parte de los excedentes que las empresas proporcionan al Banco de Alimentos.
En la primera edición de la campaña, en los meses de junio y julio del año pasado, se recogieron 350.000 kilos de alimentos y se promovieron 600 actividades, cifras que los organizadores confían repetir en la segunda.
La campaña cuenta con la colaboración del grupo teatral El Tricicle
Este año, la campaña cuenta con la colaboración del grupo teatral El Tricicle, que protagoniza un anuncio en el que se invita a no irse de vacaciones sin antes donar alimentos a entidades de la red del Banco de Alimentos.
Danone será la empresa encargada del lanzamiento de la campaña 'La fam no fa vacances' con una acción que se llevará a cabo en un espacio relacionado con los viajes en Barcelona.
Las donaciones se pueden hacer acudiendo a las actividades organizadas en la campaña, que se pueden consultar en el portal www.lafamnofavacances.org, directamente en la web www.bancdelsaliments.org, o a través de la plataforma digital solidaria Mi grano de arena, www.migranodearena.org.
"Las cifras son horrorosas y las perspectivas son malas. En la tele dicen que las cosas se están arreglando pero aquí estamos creciendo una media de 38 familias al mes y vemos gente a la que antes de un año se les acabará el paro y en el mejor de los casos tendrán 400 euros -de ayuda- y con cuarenta años no tendrán trabajo nunca más", ha explicado Maseda.
