Las empresas de alimentación y bebidas saludan el nuevo año con cierto optimismo por el desbloqueo de la demanda, mientras que algunas de ellas como Coca- Cola Iberian Partners, Nueva Pescanova o Campofrío afrontan 2016 como año decisivo por varias razones.
Coca-Cola Iberian Partners tiene pendiente su macrofusión europea que dará lugar al mayor embotellador mundial independiente de la multinacional.
Con ello, la nueva sociedad denominada Coca-Cola European Partners estará presidida por la directiva española Sol Daurella, inicia su andadura y arranca con unos ingresos netos 12.600 millones de dólares (unos 11.263,36 millones de euros).
La sociedad resultante saldrá a Bolsa entre marzo y mayo y cotizará en Nueva York, Amsterdam y Madrid; operará en Europa Occidental, con un valor de más de 20.000 millones de euros.
Por su parte, Pescanova ahora Nueva Pescanova culminará en 2016 todas sus etapas para el proceso de formación de la nueva compañía administrada por Jacobo González-Robatto, uno de los directores generales del Banco Popular.
La nueva sociedad renacerá después de llevar a cabo una fusión y doble segregación con la consiguiente ampliación de capital por la que se ha definido la nueva propiedad.
Los bancos acreedores del G7 (bancos Sabadell, Popular, Abanca, Bankia, BBVA, CaixaBank y UBI Banca) asumen el control al ostentar el 62,3 % del capital, mientras que la vieja Pescanova es el accionista individual mayoritario (con el 20 %).
El objetivo es mantener la estabilidad del actual accionariado al menos hasta que la vieja Pescanova consiga que la CNMV le dé luz verde para volver a cotizar en Bolsa.
Para Campofrío este año también será decisivo, ya que tiene previsto abrir su nueva fábrica de cárnicos en noviembre, y con la que tiene planeado sustituir la producción de la planta que se incendió hace más de un año.
Las nuevas instalaciones que se levantarán en Burgos, costarán 225 millones de euros, diez millones más que lo que estimó en un principio y la superficie se incrementará en 18.000 metros cuadrados hasta los 97.000.
Tendrá una capacidad productiva de 100.000 toneladas anuales, casi el doble que la fábrica anterior y, junto a las otras dos plantas de producción y el bloque de oficinas, formará el complejo cárnico más grande de Europa.