La industria se opone al empaquetado genérico del tabaco aprobado por la Cámara de los Comunes británica porque cree que “es una medida ineficaz”. La estandarización de las cajetillas implica que solo aparezca la marca y se eliminen los eslóganes y elementos promocionales.
La Cámara de los Comunes británica aprobó recientemente por 367 votos a favor frente a 113 en contra, la estandarización de las cajetillas de tabaco. La aprobación de la medida -que implica que los paquetes de cigarrillos se parecerán unos a otros, con la marca discretamente escrita, y destacarán los efectos perjudiciales del tabaco para la salud- ha sido muy criticada por las empresas del sector.
El portavoz de la Mesa de Tabaco, Juan Páramo, considera que “es una medida claramente ineficaz al no conseguir el objetivo de salud que persigue y desproporcionada, ya que supone la expropiación de las marcas a las empresas facilitando las actividades ilícitas de los que no cumplen la ley”.
Páramo ha añadido que “el sector del tabaco se opone a que, una vez que el empaquetado genérico ya ha sido rechazado por la Unión Europea en la nueva Directiva de Productos del Tabaco aprobada el pasado mes de mayo, Reino Unido lo adopte de forma unilateral”.
Ha explicado, además, que Australia es el único país del mundo en el que se ha aplicado esta medida y donde se ha “producido un incremento en la tasa de fumadores menores de edad, así como un alza del consumo de tabaco ilegal”.
Tasa de fumadores
En concreto, dicen desde la Mesa del Tabaco, que la tasa de fumadores de entre 12 a 17 años ha pasado del 2,5 % en 2010 al 3,4 % en 2013, lo que significa un avance del 36 %; mientras que el consumo de tabaco ilícito ha aumentado casi un 25 %, al pasar del 11,5 % en 2012 al 14,3 % en el primer semestre de 2014.
La Mesa del Tabaco es una agrupación en la que está representado el conjunto del sector del tabaco, es decir, agricultores, transformadores, industria, mayoristas, fabricantes de máquinas expendedoras, estancos, además de la CEOE y las federaciones agroalimentarias de UGT y CCOO.

La normativa entrará en vigor en el Reino Unido en mayo de 2016, si supera el trámite de votación en la Cámara de los Lores.
El portavoz oficial del primer ministro, el conservador David Cameron, dijo que éste había “votado a favor”.
“Está contento de que las regulaciones hayan sido aprobadas”, declaró la fuente.
El director de asuntos corporativos de Philip Morris Limited, James Barge, adelantó que la compañía “buscará compensación” por “el ataque innecesario e irracional a la propiedad privada que denigra productos que el público adulto bien informado decide comprar”.
“El Gobierno británico está ignorando puntos legales importantes recogidos en la legislación británica, europea e internacional”, advirtió.
El líder adjunto del populista Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), Paul Nuttall, dijo que la medida “infringe el principio de la elección personal”.
Contrabando
“Además, no va a tener el resultado que quienes la defienden sugieren -sostuvo-. Los paquetes estándar van a llevar a un aumento del contrabando y quién sabe qué sustancias tóxicas podrían meterse dentro, me entran escalofríos de pensarlo”.
La directora de la organización no gubernamental Acción contra el tabaco y para la salud (Ash), Deborah Arnott, felicitó por su parte al Gobierno y a los diputados “por resistir las tácticas de acoso y desinformación de la industria tabaquera” e introducir “la reforma de salud pública más importante de esta legislatura”.
La Fundación Británica del Corazón describió la medida como “una destacada victoria que salvará cientos de vidas”.
Australia se convirtió en 2011 en el primer país del mundo en introducir la homogeneización de los productos de tabaco -también con una gran oposición del sector tabaquero-, mientras que Irlanda aprobó el año pasado legislación al respecto, que entrará en vigor en 2017.