La comarca de Los Oscos, integrada por los concejos de Santa Eulalia, San Martín y Villanueva, ha sido galardonada con el Premio al Pueblo Ejemplar de Asturias 2016, por combinar tradición y modernidad, y aunar la conservación de la naturaleza con su desarrollo económico.
El jurado de esta XXVII edición, a la que han concurrido veinte candidaturas, destacó que los vecinos de la comarca han sido capaces, en las tres últimas décadas, de articular un plan colectivo que combina “equilibradamente” tradición y modernidad.
Ha valorado su esfuerzo para “aunar la conservación de la naturaleza y el patrimonio cultural con el desarrollo económico basado en la ganadería y el turismo rural”.
En la actualidad, Los Oscos cuenta con unos 1.370 vecinos repartidos entre los citados tres concejos que forman parte de la Reserva de la Biosfera Oscos-Eo y Tierras de Burón, declarada como tal por la Unesco en 2007.
El jurado de este premio, dotado con 25.000 euros y que promueve la Fundación Princesa de Asturias, considera a esta comarca del occidente del Principado, limítrofe con la provincia de Lugo, “un ejemplo a destacar, especialmente en este tiempo de crisis del medio rural en Asturias”.
Personalidad histórica propia
La comarca de Los Oscos está enclavada en un paraje de media montaña, guarda vestigios de haber sido ocupada desde antiguo -numerosos túmulos que dieron paso a la cultura castreña- y tiene una personalidad histórica propia acreditada desde la Edad Media.
Con un origen eminentemente agrario, este territorio se vio beneficiado por la oferta de carbón vegetal, la fuerza hidráulica y los yacimientos de hierro para experimentar un auge industrial hasta que a mediados del siglo XIX, cuando la industria del hierro empezó a acusar el agotamiento de los bosques y el traslado tecnológico al carbón de piedra, lo que supuso un ocaso económico que favoreció que la comarca se sumara a la corriente migratoria regional hacia América.

No fue hasta los años 80 del pasado siglo, cuando Los Oscos contaron con planes específicos de desarrollo, que comenzaron con la mejora de carreteras e, incluso, con la construcción de una que comunicara Samartín y Santalla, capitales unidas hasta entonces por un camino de herradura.
La inversión en infraestructuras y la dotación de servicios permitieron fijar población, y los fondos europeos y las directivas comunitarias en materia agraria impulsaron la modernización de las explotaciones ganaderas de la comarca.
El turismo también empezó a formar parte del despegue económico de la zona e impulsó la recuperación de abundante patrimonio etnográfico y cultural, la dotación de museos y la rehabilitación respetuosa de casas para su uso como alojamientos rurales.
El galardón está destinado a reconocer “al pueblo, aldea, núcleo de población, espacio paisajístico o grupo humano del Principado de Asturias que haya destacado de modo notable en la defensa y conservación de su entorno natural, ambiental, de su patrimonio histórico, cultural o artístico, o también en la realización de obras comunales u otras manifestaciones de solidaridad sobresalientes”.
Los vecinos de Los Oscos esperan con impaciencia el acto institucional de la entrega de este galardón con la presencia en la comarca de los Reyes de España, un día después de la ceremonia de entrega de los Premios Princesa de Asturias, que previsiblemente se celebrará en Oviedo el 21 de octubre.