La transformación digital ha penetrado de forma distinta en este sector, ya que la industria alimentaria “normalmente se provee de procesos más potentes”, según la subdirectora general de Innovación y Digitalización, Rocío Wojski.
La subdirectora general de Innovación y Digitalización del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, Rocío Wojski, ha asegurado que la transformación digital en el sector agroalimentario tiene que ser un plan “estructurado que repercuta en todos los actores” de la cadena.
La transformación digital ha penetrado de forma distinta en este sector, ya que la industria alimentaria “normalmente se provee de procesos más potentes” que tienen una “mayor necesidad de conectividad, de velocidad de procesamiento o manejo de datos”, según ha expuesto este lunes durante su participación en una jornada técnica sobre medidas de apoyo a la industria agroalimentaria 4.0 organizada por el MAPA.
Sin embargo, el sector productor agrario presenta una “capacidad de absorción” tecnológica “muy diversa”.
En ese sentido, las políticas públicas “tienen que pensar en actuaciones a medida del contexto de cada una” y abordar esa transformación digital con una “visión de cadena”.
Otra diferencia, ha reconocido, es que la industria alimentaria se beneficia de apoyos “más transversales” que pueden llegarle desde el Ministerio de Industria o a través de diferentes estrategias de apoyo a la digitalización, mientras que el primario “en ese sentido cuenta únicamente con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para desarrollar medidas” al respecto.
En líneas generales, ha indicado que la industria agroalimentaria tiene una capacidad de innovación “muy alta”.
Por su parte, el secretario general de la plataforma Food for Life-Spain y director de I+D+i de la Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB), Eduardo Cotillas, ha reconocido que “no todos” los sectores “van a la misma velocidad” en el proceso de digitalización en esta industria.
No obstante, ha asegurado que “todos son muy conscientes” de las “diferentes tecnologías” existentes, a la vez que ha destacado la “confianza” con la que trabajan las empresas con los centros tecnológicos.
“Prácticamente todos los proyectos empresariales van aparejados a un centro tecnológico” que ayuda al desarrollo de procesos innovadores a las compañías.

Cree que “probablemente” ya se pueda hablar de industria 5.0: “Es un concepto que se empieza a oír” y la tecnología actual disponible estaría “muy cerca” de considerarse en ese nivel.
El sector agroalimentario, según ha remarcado, está siempre dispuesto a “escuchar las nuevas propuestas en innovación”.
Además, en su intervención ha detallado el cometido de la plataforma Food for Life-Spain que en 2019 consiguió impulsar más de 125 proyectos innovadores valorados en más de 135 millones de euros.
El responsable de Ingeniería de Procesos e Industria 4.0 de la Asociación Nacional de Fabricantes de Conservas de Pescados (Anfaco-Cecopesca), Hugo Barreiro, ha destacado en su intervención el uso que hacen de la tecnología de visión hiperespectral en proyectos como “SpecTUNA” con la que automatizan el corte y clasificación de atún congelado.
El director de Transformación Digital de Cerealto Siro Foods, Juan Manuel García, ha incidido en la importancia que la “inteligencia artificial” tiene en su compañía para conocer “las preferencias de los consumidores” y, a partir de ahí, analizar los datos para adaptar sus producciones hasta conseguir un modelo “completamente digital” con procesos “más eficientes” en los que cobran importancia la trazabilidad y la seguridad alimentaria.
El director de Tecnología de Bodegas Familiares Matarromera, Rubén Arce, ha señalado que cuentan con un plan estratégico tecnológico cuya implantación se ha acelerado por la covid-19 y en el que incluyen programas como un uso más eficiente de los fitosanitarios, aplicando el producto sólo sobre las cepas y en la cantidad que cada una requiere, con lo que ello supone de ahorro en costes y de beneficio medioambiental.
El experto en el sector agroalimentario del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), Carlos Franco, ha explicado algunos de los “instrumentos” que ofrecen a las empresas para que desarrollen tecnología, entre los que se encuentra ahora activo el programa “Cervera” con 10 áreas estratégicas de actuación, una de ellas “la cadena alimentaria segura y saludable”.
Por su parte, el director de IT e I+D+i de la empresa Faccsa Prolongo, Francisco Requena, ha presentado el proyecto comunitario RoButcher que arrancó en enero pasado y cuyo fin es impulsar el uso de la robótica en los procesos de sacrificio y despiece de las canales en la industria cárnica.