La fragancia de la brisa marina, playas, naturaleza, aguas cristalinas y un clima soleado todo el año… Todo esto y más ofrece el Mar Menor -en la Región de Murcia, un lugar ideal para pasar unas auténticas vacaciones de relax y descanso.
Sus buenas temperaturas, su ausencia de oleaje y su poca profundidad hacen que el azul del mar se intensifica en sus orillas. Se trata de la mayor laguna de agua salada de Europa, con más de 50 playas, todas de aguas templadas. Es, por tanto, un lugar muy recomendable para disfrutar en familia en cualquiera de los establecimientos hoteleros o centros turísticos diseñados para hacer un parón en las rutinas diarias y relajarse.
Del azul al verde
Esta zona también cuenta con parques naturales y parajes verdes de especial belleza, como el Parque Regional de las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar, el humedal más importante de la Región de Murcia. En la sala de exposiciones del Centro de Visitantes “Las Salinas”, espera toda la información sobre este paraje, que es un rincón preferente para los viajeros amantes del avistamiento de pájaros. En este lugar, podrán divisar y fotografiar a los elegantes flamencos rosados que allí habitan. Otra recomendación interesante es realizar una de las rutas de senderismo frente al mar y terminar con un refrescante chapuzón en el Mediterráneo.
En el Parque Regional de Calblanque, por su parte, calas y barrancos, y sus extensas playas de arena dorada, componen un escenario sin parangón para disfrutar del contacto directo con la naturaleza sin aglomeraciones.
El culto al cuerpo
En la costa del Mar Menor hay varios centros de talasoterapia con programas ideados con el único fin de que el viajero se olvide de las tensiones y mejore su salud a través de la relajación. Los lodos del Mar Menor son curativos. Embadurnarse en ellos y combinarlos con sus aguas, ricas en minerales y yodos, son un auténtico aliado para un verdadero descanso.
Los viajeros en busca de algo más de actividad tienen un importante abanico de posibilidades con los deportes náuticos, como vela, windsurf, piragüismo, stand up paddle o esquí acuático. Para expertos, principiantes y aficionados hay diferente escuelas en la Estación Náutica del Mar Menor-Cabo de Palos.
Si con toda esta actividad se nos abre el apetito, estamos en el rincón perfecto, pues los pueblos pesqueros del Mar Menor son el lugar perfecto para degustar algunas especialidades de la zona en una terraza frente al mar. El imprescindible, el caldero del Mar Menor, un plato típico que comían los pescadores de la costa de Cartagena con caldo de pescado y arroz.
