Los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas cayeron el 0,2 % en febrero respecto al mes anterior, principalmente por la caída de los precios de pescado fresco y, en menor medida, carne, legumbres y hortalizas frescas.
La caída de los precios de pescado, carne, legumbres y hortalizas frescas arrastraron a la baja el IPC alimentario durante el segundo mes del año.

La variación mensual del Índice de Precios al Consumo (IPC) fue negativa en rúbricas como la carne de ovino (-5,1 %) o el pescado fresco y congelado (-5,9 %), mientras que fue positiva en alimentos como las frutas frescas, que repuntaron el 5,5 %.
En referencias importantes de la cesta de la compra, cayeron ligeramente los precios de huevos (-0,2 %), leche (-0,5 %) y lácteos (-0,6 %) o aceites y grasas (-0,1 %).
Evolución interanual
Por su parte, la variación interanual del IPC de alimentación en febrero, según los datos difundidos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), fue alcista (+0,9 %).
Las categorías del IPC de alimentos y bebidas no alcohólicas oscilaron en tasa interanual entre los repuntes de los huevos (+6,5 %) y los aceites y grasas (+7,2 %); y los descensos que lideraron las legumbres y hortalizas frescas (-10,6 %) o las patatas (-7,3 %).
En general, el IPC se situó en el 1,1 % interanual, cinco décimas por encima de la subida de precios de enero por el encarecimiento de la electricidad y, en tasa mensual, registró un ascenso del 0,1 %.