La compañía cárnica ha agradecido de forma especial el esfuerzo de los trabajadores que en estos meses de transición, hasta que esté lista la nueva planta en noviembre de 2016, se están esforzando para mantener el nivel de producción y ventas, pese a no poder hacerlo en las mejores condiciones.

Para otra trabajadora de la planta, Emi Moral, el acto ha sido “muy emotivo”, por lo que ha agradecido a los directivos de Campofrío su “gesto” con los trabajadores.

La planta costará 225 millones de euros, tendrá una superficie de 97.000 metros cuadrados y  su inversión
superará en diez millones la prevista en el proyecto inicial, presentado hace unos meses, y la superficie se incrementará en 18.000 metros cuadrados.

Tendrá una capacidad productiva de 100.000 toneladas anuales, casi el doble que la fábrica anterior y, junto a las otras dos plantas de producción y el bloque de oficinas, formará el complejo cárnico más grande de Europa,

En este acto, María López, una de las trabajadores que más recientemente se había incorporado a la plantilla de Campofrío, destaca también a Efe el “ambiente de amistad” que se ha generado entre los trabajadores de la planta incendiada, que hoy han visto como se inicia la construcción de una nueva factoría en la que van a poder volver a trabajar.