La cadena de supermercados DIA cerró un ejercicio 2019 aciago con 790 millones de euros de pérdidas, una caída en ventas superior al 9 % y el cierre de 861 tiendas, reflejo de un ejercicio extremadamente complicado para el grupo y en el que llegó a situarse incluso al borde de la insolvencia
El informe de resultados anual de la compañía, difundido este jueves, es prolijo en detalles sobre el carácter negativo de estos resultados, no obstante, fuentes de DIA han subrayado que el nuevo equipo gestor -al mando desde mayo de 2019- ha optado por “hacer limpia” en el balance, que los ajustes más severos ya han sido adoptados y confían en haber sentado las bases para volver a crecer.
Detrás del nuevo equipo se encuentra el mayor accionista, el magnate ruso Mijaíl Fridman, que lanzó con éxito una opa sobre la firma el pasado año -no exenta de polémica- y que posteriormente alcanzó un acuerdo con la banca acreedora para aliviar la situación financiera de la compañía, gracias en parte también a una ampliación de capital.
El 2019 pasará igualmente a la historia de la empresa debido a un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectó a más de 1.200 empleados y a la detección de “irregularidades contables” en el seno del grupo, lo que ya ha derivado en una investigación judicial que apunta a la antigua cúpula directiva liderada por su ex consejero delegado Ricardo Currás.
Más dudas, menos ventas
Las cuentas conocidas hoy revelan que toda la incertidumbre generada en torno al futuro de la empresa tuvo impacto en el negocio, especialmente en las ventas, con una caída del 9,3 %, hasta los 6.870 millones de euros.
En España, los ingresos bajaron un 8,2 %, hasta 4.177 millones; además en Brasil cayeron un 16 %, hasta 1.182 millones; en Argentina se contrajeron un 5,5 %, hasta 917 millones; y en Portugal recularon un 7,9 %, hasta los 594 millones.
El Ebitda ajustado de la empresa, por su parte, alcanzó los 34,1 millones de euros al cierre de 2019, once veces menos al registrado un año antes, y la deuda neta del grupo ascendía a cierre del ejercicio a 2.027,7 millones de euros, frente a los 1.451 millones de un año antes.
España y Brasil copan la mayoría de cierres
Las ventas se vieron afectadas por múltiples factores, pero especialmente por el cierre de establecimientos, ya que DIA redujo su parque total de establecimientos en un 11 %, hasta los 6.626 supermercados.
De los 861 cierres ejecutados, España y Brasil concentraron la mayoría con 458 y 321, respectivamente.

A ello se suma una reordenación de su estructura, ya que la compañía ha optado por deshacerse o asumir la gestión de centenares de franquicias con baja rentabilidad a la espera de encontrar en el futuro “franquiciados altamente cualificados que ofrezcan a los clientes mejor experiencia de compra”.
También se ha decidido reducir el surtido comercial en sus tiendas y se han cerrado almacenes y negocios secundarios, todo ello con un impacto en las ventas al que también se sumaron los “niveles extraordinarios de falta de inventario” -es decir, estanterías vacías- provocados por los problemas que tuvo con sus proveedores.
Reflotar la compañía
Fuentes de DIA han explicado que los datos que manejan apuntan a una caída superior al 7 % del gasto realizado por los consumidores en la cesta de la compra, pero el tráfico de clientes se ha mantenido prácticamente estable, lo que en su opinión es señal de “fidelización”.
Por este motivo, el grupo espera subir en ventas y recuperar cuota de mercado con las “mejoras operativas” que ya está aplicando -en la sección de frescos, en su marca blanca, etc.-.
De hecho, en el informe de resultados se apunta que el proyecto sólo se traducirá en efectos positivos a nivel de rentabilidad “en el medio-largo plazo”; fuentes de la compañía han asegurado que la inversión Capex únicamente se retomará a partir del próximo año.
Además, han destacado la posición de liquidez alcanzada por DIA tras la refinanciación, con 421 millones de euros, y han avanzado que tienen previsto comenzar a renegociar la línea de bonos que vence en julio de 2021 -por 300 millones de euros- para llegar a un acuerdo y extender su vencimiento antes de que acabe este año.