El 93 % de las veces que los consumidores españoles fueron al supermercado en marzo encontraron el producto que buscaban, un porcentaje superior al registrado en otros países europeos, según un estudio difundido por la patronal Aecoc.
La Asociación de Empresas de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc) ha impulsado, en colaboración con la consultora Nielsen, el “Barómetro OSA” para analizar la respuesta de la cadena agroalimentaria al incremento de la demanda de productos básicos en las primeras semanas de la crisis de la covid-19.
Según este informe, la distribución española registra mejores ratios de disponibilidad de productos en las tiendas, frente a las roturas de “stock” del 18 % en Francia y del 12 % en Italia y Bélgica durante los primeros días de confinamiento.
En España, el índice de disponibilidad de productos se redujo solamente 2,8 puntos respecto a marzo de 2019, lo que “confirma la eficacia de la cadena de suministro alimentario desde el inicio del confinamiento” para contener el coronavirus.

El director general de la patronal, José María Bonmatí, ha justificado en una nota ese comportamiento por “el modelo de proximidad” español, que “ha sido capaz de mantener un abastecimiento continuado incluso cuando la frecuencia de reposición ha aumentado”.
La distribución española tuvo una evolución del índice similar a la de Canadá durante la crisis y mejor que la de Australia, que llegó a sufrir un 20 % de falta de “stock” en los primeros días del confinamiento decretado en el país.
El informe, realizado tras la monitorización de las principales categorías de consumo en las tiendas de ocho distribuidores líderes, muestra que en España la mayor demanda se registró el 13 de marzo -un día antes de que se decretara el estado de alarma-, con un crecimiento del 179 % de las ventas de los distribuidores.
Durante ese fin de semana, la disponibilidad de productos bajó hasta el 90 % debido a las compras de acaparamiento y después remontó, estabilizándose en cerca del 93 % en las siguientes semanas.