Estudiantes a futuros cocineros aprenden a elaborar y servir platos de alta cocina con alimentos de la tierra y el mar de Cantabria para potenciar su riqueza gastronómica y bajo la tutela de reconocidos chef de la región.

Ingredientes de la huerta, lácteos y sus derivados, conservas, carnes y pescados son los protagonistas de unas jornadas celebradas en el instituto Fuente Fresnedo, de Laredo (Cantabria) gracias a la Oficina de Calidad Alimentaria de Cantabria, que, además, ha programado charlas formativas y la creación de un variado menú degustación cada semana.

El objetivo es preparar de manera “divertida” platos para satisfacer el paladar de los comensales y sorprenderles con una presentación “sugerente” con productos de la tierra, explica Maytane Gimeno, una de las participantes en el curso.

Desde hace algunos años a esta joven cocinera le llama la atención el sector culinario y, aunque hoy día trabaja en un hotel, se ha aventurado a estudiar hostelería porque su sueño es “convivir” entre los fogones de un restaurante para elaborar propuestas de cocina fusión.

“Me gustaría crear platos vanguardistas más que ligar mi actividad laboral a una elaboración tradicional, pero tal y como está la situación actual me conformo con cualquier tipo de cocina”, confiesa Maytane.

Por ello, subraya que estos encuentros gastronómicos le sirven para conocer de primera mano los entresijos y secretos para el buen funcionamiento de una cocina.

Tampoco se imaginó que podría cocinar con productos de “tanta calidad” y manejar modernas técnicas de cocción con nitrógeno líquido de la mano de cocineros como David Pérez, Rubén Abascal, Florencio Bueyes, Ángel Bello e Ignacio Solana, ganador de una nueva “Estrella Michelín“.

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