El edificio Berlaymont, sede de la Comisión Europea en Bruselas (Bélgica). Foto: Efeagro/Oliver Hoslet

El edificio Berlaymont, sede de la Comisión Europea en Bruselas (Bélgica).Efeagro/Oliver Hoslet

Documento publicado en Twitter

La Comisión prepara herramientas para mejorar la actuación ante crisis alimentarias

Publicado por: EFEAGRO 20 de mayo de 2015

La Comisión Europea (CE) se ha fijado como prioridad seguir desarrollando los instrumentos para responder a nivel europeo a posibles crisis alimentarias, según ha explicado el titular europeo de Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, en una carta dirigida a los ministros europeos de Agricultura.

Según el documento, que el comisario ha publicado este martes en la red social Twitter, Bruselas quiere dar prioridad “a distintas iniciativas para garantizar que las herramientas que utilizamos diariamente para mantenernos preparados y vigilantes nos permiten a la CE y a los países comunicarnos y cooperar de la manera más eficiente en caso de crisis”.

En los últimos años, la necesidad de seguir trabajando en ese ámbito se puso de manifiesto con crisis alimentarias como el brote de la bacteria “E.coli” en 2011, que afectó sobre todo a los productores de pepino en España, o el fraude ocurrido en 2013 con la carne de caballo etiquetada como de vacuno.

Andriukaitis dice que, ya sea un asunto de seguridad alimentaria, un riego para la salud animal o vegetal o una práctica fraudulenta, “la clave de una gestión de crisis con éxito a nivel europeo radica en el despliegue eficiente y a tiempo de la cooperación entre los afectados“.

Enfoque estratégico

Por otra parte, el comisario menciona la necesidad de debatir con los países un “enfoque estratégico” sobre las herramientas de control para garantizar que los productos agroalimentarios de terceros países cumplen las mismas reglas que se aplican a los europeos.

Para ello, propone trabajar a partir de la legislación ya existente y reforzar las reglas sobre controles oficiales, un asunto que ahora está siendo objeto de negociación a nivel europeo.

“No podemos permitir la situación de que productos más baratos y que incumplen, procedentes de terceros países, dañen el nivel de protección y la confianza de los consumidores y los negocios que respetan la ley”, según el comisario.

Otra de las prioridades del comisario es la revisión de la legislación sobre los transgénicos, un asunto ya avanzado gracias a la adopción el pasado marzo de una directiva que da más libertad a los países para autorizar o prohibir esos cultivos.

En los próximos meses, el debate se centrará sobre cómo dar una propuesta al uso de los transgénicos en alimentos o piensos.

La definición de una normativa sobre los disruptores hormonales o endocrinos, las iniciativas para frenar la resistencia antimicrobiana, y la salud animal serán otros de los objetivos del comisario, según añade la carta.