Los precios de los alimentos y de las bebidas no alcohólicas subieron un 16,6 % en febrero en comparación con el mismo mes de 2022, más de un punto que la tasa interanual del pasado enero (15,4 %), según el Índice de Precios de Consumo (IPC) difundido este martes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
En la comparación mensual, los precios de los alimentos subieron un 2 % en febrero debido a subidas de precios generalizadas en la mayoría de sus componentes.
La inflación, acrecentada por la guerra de Ucrania, motivó que el Gobierno eliminara el IVA en ciertos alimentos básicos y lo bajara del 10 al 5 % en la pasta y el aceite desde el pasado 1 de enero.
Las bebidas alcohólicas y el tabaco subieron su precio un 8,4 % en febrero en comparación con el mismo mes de 2022 y un 1,1 % respecto al mes pasado.
El IPC general refleja una subida del 6 % respecto a febrero del año anterior, una décima por encima de la anual registrada en enero, mientras que la variación mensual del índice general es del 0,9 %.
El ENCARECIMIENTO DE LAS LEGUMBRES Y LAS CARNES INFLÁ EL IPC
El grupo de alimentos y bebidas no alcohólicas ha sido uno de los que más ha influido en el aumento de la tasa anual del ICP.
En este comportamiento han influido, sobre todo, el aumento de las legumbres y hortalizas, cuyos precios suben más que el año pasado; la carne, que incrementa su precio frente a la disminución en 2022; y el pescado y marisco, cuyos precios disminuyen menos que el año pasado.
Por el contrario, la leche, queso y huevos aumentan sus precios menos que en 2022.
En lo que respecta a la evolución mensual, ha habido subidas de precio en la mayoría de los componentes del grupo de alimentación y bebidas no acohólicas.
Entre ellas, destacan las de las legumbres y hortalizas, las frutas, agua mineral, refrescos y zumos, pan y cereales, y otros productos alimenticios. Destaca también en este grupo, aunque en sentido contrario, el pescado y marisco, cuyos precios se han reducido en febrero.
