Vista de un puesto con frutas y hortalizas en un mercado de Madrid. Archivo EFE/ Javier Lizón

ALIMENTACIÓN EQUILIBRADA

Casi uno de cada diez europeos no puede permitirse una comida equilibrada con regularidad

Publicado por: EFEAGRO/Hugo Struna 1 de agosto de 2023
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En 2022, el 8,3 % de la población de la Unión Europea (UE) no podía permitirse una comida equilibrada de forma regular, según una encuesta.

“El número de personas que no pueden permitirse una comida decente de forma regular ha aumentado en Europa”, se lee en los resultados de la última encuesta de Eurostat publicada el 10 de julio.

La oficina de estadísticas se ha basado en la capacidad de realizar una comida con carne, pollo, pescado o un equivalente vegetariano cada dos días, un indicador europeo que permite calcular las tasas de privación material y social severa.

Este tipo de privación ha pasado así del 7,3 % de la población de la UE en 2021 al 8,3 % en 2022.

La tasa más baja se encuentra en Irlanda (1,4 %), seguida de Chipre (1,5 %) y Luxemburgo (1,8 %). Rumanía, Bulgaria y Eslovaquia cierran la lista, con el 22,1 %, el 21,6 % y el 15,8 % de su población, respectivamente. Francia, con el 9,5%, está ligeramente por encima de la media europea.

“Esto confirma lo que estamos viendo sobre el terreno, es decir, un aumento de la inseguridad alimentaria desde 2020”, precisa a EURACTIV Barbara Mauvilain, responsable del departamento de relaciones institucionales de la Federación Francesa de Bancos de Alimentos.

Inflación de alimentos

Estas dificultades para lograr una dieta equilibrada están directamente relacionadas con la inflación que siguió a la crisis de la covid y la guerra en Ucrania.

En 2022, la inflación alimentaria subió al 12,68 % en Francia, con una media europea del 18,2 %, según Eurostat. En Hungría, la inflación de los alimentos llegó incluso al 45 % en un año.

Esta disminución del poder adquisitivo ha llevado a una mayor afluencia de personas en los bancos de alimentos. Desde 2020, la Federación Francesa de Bancos de Alimentos ha tenido un 30 % más de solicitantes y un 9 % más entre 2021 y 2022. La asociación apoya a 2,4 de los 5 millones de personas que recurren a la ayuda alimentaria en Francia.

La inseguridad alimentaria se ha triplicado en 10 años, 2,4 millones de personas la sufrían en 2022

Es un fenómeno que se observa en toda Europa. Según el organismo Pour la Solidarité, casi 16 millones de europeos dependen de la ayuda alimentaria proporcionada por las diversas organizaciones benéficas.

Sin embargo, la capacidad de permitirse una comida decente forma parte de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), adoptados por las Naciones Unidas en 2015, como recuerda la Comisión Europea en su comunicación.

Poblaciones más heterogéneas

La encuesta de Eurostat también muestra que la proporción de personas "en riesgo de pobreza" alimentaria también ha aumentado en los últimos años, del 17,3 % al 19,7 % de la población en Europa.

Mientras que países como Bulgaria (44,6 %) o Rumanía (43 %) muestran tasas elevadas, Francia (24,5 %) y Alemania (24 %) se encuentran entre los 10 países donde esta pobreza es más acusada, debido al aumento de la precariedad social y laboral.

Para Barbara Mauvilain, la pérdida del trabajo se convierte en la principal causa de acceso a la ayuda alimentaria, que se suma a los motivos ya conocidos por los servicios sociales y alimentarios: separación, divorcio y enfermedades.

Estamos acogiendo cada vez más a personas que tienen trabajo y vivienda. Y entre ellos, el 60 % tiene un contrato fijo, generalmente a tiempo parcial”, agrega Mauvilain.

Un joven hace la compra en un supermercado de Madrid. Efeagro/Luis Millán
Un joven hace la compra en un supermercado de Madrid. Efeagro/Luis Millán

Según un estudio del instituto CSA publicado a finales de febrero, más de un tercio de las personas atendidas por los bancos de alimentos llevan menos de seis meses con ellos.

La comida se ha convertido en la segunda partida de gasto de las personas beneficiarias, por detrás de la vivienda, y ahora por delante de las facturas de agua y energía.

Apoyo europeo a la ayuda alimentaria

A finales de octubre de 2022, la Comisión Europea adoptó un nuevo programa de Apoyo europeo a la ayuda alimentaria (SEAA) del Fondo Social Europeo Plus (FSE+).

Este programa de 647 millones de euros durante el periodo 2022-2027 permite a los Estados luchar contra la inseguridad alimentaria.

En Francia, el Ministerio de Salud y Prevención y el Ministerio de Agricultura (FranceAgriMer) proporcionan productos a las cuatro asociaciones autorizadas: Cruz Roja, Bancos de Alimentos, Restos du Coeur y Secours Populaire.

"Es una herramienta valiosa", insiste Barbara Mauvilain. El 20 % de los productos del Banco de Alimentos son financiados por la UE de esta forma y el resto lo aportan diversos actores nacionales (Estado, gran distribución, industria, productores y particulares).

“Esta financiación plurianual brinda estabilidad y visibilidad con respecto a los productos que se pueden distribuir durante el año”, agrega.

A pesar de un ligero aumento en el presupuesto de 587 millones de euros (2014-2020) a 647 millones (2022-2027), esto no es suficiente para algunos como el eurodiputado Emmanuel Maurel, quien recientemente pidió a la Comisión Europea que lo aumente.

La inseguridad alimentaria se ha triplicado en 10 años, 2,4 millones de personas la sufrían en 2022. ¡Europa puede y debe hacer más para ayudarlas!”, expresó en Twitter.

Por su parte, la Federación Francesa de Bancos de Alimentos quiere que la UE renueve el plan de recuperación puesto en marcha para combatir las consecuencias de la crisis de la covid (React-UE), que finalizó en 2022.

El Fondo Social Europeo había aportado entonces 182,3 millones de euros a Francia, de los que parte son para ayuda alimentaria.

“La situación es al menos tan importante, si no más, que durante la covid, según muestran las cifras de Eurostat. Por tanto, sería legítimo lanzar un React-UE 2, en particular para luchar contra la inseguridad alimentaria en Europa”, concluye Barbara Mauvilain, que estima en 150 millones de euros las necesidades para las cuatro grandes redes asociativas.

Según las últimas proyecciones del Banco de Francia, la inflación de los alimentos debería descender gradualmente hasta el 4 % en el último trimestre de 2023, antes de volver al 2 % en 2025. Unas proyecciones que no tranquilizan a los actores de la ayuda alimentaria, que recuerdan que los precios no bajarán para muchas personas.

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