El uso del "táper" se desinfla: según los datos del Panel alimentario dados a conocer hoy cayó un 2 % la preparación de comida para tomar fuera, parámetro que se relaciona directamente con el incremento en torno al 3,7 % de las visitas a los establecimientos hosteleros que se produjo el año pasado.
El Informe de Consumo Alimentario de 2018 refleja que el uso de las tarteras cae aún más (-3,8 %) cuando se trata de cubrir dos de las principales comidas del día (almuerzo y cena).
Con estos datos, el dossier concluye que "existe una correlación o un trasvase" entre las ocasiones en que se deja de utilizar la tartera para comer fuera del hogar.
Respecto a los hábitos en la dieta diaria en el hogar, la evolución de las ocasiones en las que se desayuna, almuerza o cena en casa apenas varía de un año a otro, pero sí aumentan de forma relevante las comidas entre horas a media mañana (+3,6 %), la merienda (+2,8 %) o después de cenar (+8 %).
Adiós al menú de dos platos
Por otra parte, se consolida un año más la preferencia por consumir un único plato en el hogar (61,2 % de las ocasiones), frente al tradicional menú de dos platos, una tendencia que en dos años ha subido 3,7 puntos.

La dieta de los españoles sigue siendo sana y equilibrada, de acuerdo a los datos del estudio, con la ensalada verde como plato más habitual (pese a que se redujo en un 4 % el número de veces que fue consumida), seguida de las pizzas (-0,4 %) y la ensalada de tomate (que es la que más crece: un 9,2 %); el "top 15" de platos más consumidos lo cierran los espaguetis (0 %) y la paella (-1,2 %).
En cuanto a la forma de cocinar, se mantiene con pocas variaciones respecto a 2017 y siguen siendo la plancha, en frío o sin cocinar, el hervido y el guisado las elaboraciones más empleadas; cierran el ranking las frituras, el horno, el microondas y los rebozados.
A la hora de elegir el plato que se va a comer, el principal motivo es la conveniencia (29,4 % de las ocasiones), el placer (22,7 %), el sabor (20,2 %), la salud (13 %) y la costumbre (7,1 %).