“Sea una emergencia, una ruta o una Realidad aumentada, el orgullo de Tragsa es dar servicio integral a la sociedad”

Publicado por: Efeagro/Laura Cristóbal 9 de marzo de 2023

Pertenece al Grupo Tragsa desde 2005 y sintetiza estos casi veinte años en una sucesión de tareas -y muchos logros- de un equipo del que se “siente orgulloso” y con el que está convencido de que “ayudan a crear una sociedad mejor”.

Ingeniero de Montes de formación, Román Esteban dejó su Rioja natal “por amor” y se volcó en proyectos de restauración ambiental, zonas verdes y paisajismo, como los que recuperaron los parques forestales de Valdebebas (Madrid) y de Las Contiendas (Valladolid), actuaron en la Ciudad del Medio Ambiente en Soria y colaboran en la mejora del Mar Menor, a través de humedales seminaturales, en lo que supone una apuesta por soluciones basadas en la naturaleza para reducir los contaminantes que le llegan.

Las rutas científico-artísticas-literarias, encargadas por el Ministerio de Educación, le llevaron hace nueve años  -y le llevan aún- a recorrer España con unos 3.000 niños cada año, de unos 80 colegios, seleccionados de casi 500 que se presentan al proyecto.

“Se les lleva a un territorio que no sea el suyo con niños que no son de su zona, y participan en una experiencia educativa, gratuita, en la que Grupo Tragsa se encarga desde los hoteles a los monitores o las actividades. Y de la se observa retorno inmediato”, explica Román. “En una página web los niños aportan fotos y mensajes para sus padres, que pueden ver los talleres de ciencia, de arte, de literatura…”.

Cuando se sumaron el afán por la divulgación con la pasión por las nuevas tecnologías, la ecuación dio lugar a un proyecto de aplicación de técnicas de Realidad Aumentada en la interpretación del patrimonio. Y que analizado en su conjunto no es sólo el desarrollo de herramientas tecnológicas para aportar información y formación a los visitantes de un patrimonio ya sea arquitectónico, histórico o artístico. Es también la culminación de la unión de un buena idea -secundada por el Grupo-, un trabajo en equipo que incluye a arqueólogos o a desarrolladores de diseño, pruebas de campo para analizar constantemente qué funcionaba y a qué coste en distintos proyectos desde 2010, y finalmente su implementación en el Parque Arqueológico de Segóbriga (Cuenca), a través del proyecto InterpretaTIC (dentro del europeo “Polirural”, el que la empresa pública participa junto a una decena de países comunitarios.

En este Parque, los visitantes podrán -a través de una tableta o móvil-  recibir no sólo información accesible y ser alertados de los distintos puntos de interés, sino observar la recreación arquitectónica o artística del yacimiento visigodo y romano en su esplendor.

“Si con la tableta te sitúas frente a una estatua o una estela funeraria incompleta, el programa se la mostrará como fue en su estado original y en tres dimensiones“, pone como ejemplo Esteban, quien simboliza esta posibilidad como una puerta dimensional que permite vislumbrar el pasado e interpretar toda su riqueza histórica y cultural.

Para su desarrollo, subraya el gran apoyo de la directora científica del Parque, Rosario Cebrián, que les ha facilitado “los legajos y los dibujos de años y años de excavaciones” que una vez digitalizados han nutrido de contenido visual esa realidad aumentada que es capaz de hacer que “el visitante  se sienta  partícipe del lugar; que no sólo se hagan un selfie, sino que pasen de la imaginación de lo que fue a verlo e implicarse de una forma emocional; que no llegue y vea solo un panel con datos, que además se puede deteriorar, sino que cruces el umbral de una puerta derruida y al girarte todo el entorno esté reconstruido”, describe.

Esta herramienta tecnológica se acaba de presentar de forma interna a todo el Grupo, pues su potencialidad en todo el territorio es tal que no sólo se puede extender a todo tipo de patrimonio artístico, sino que puede utilizarse respecto a los recursos naturales o incluso a los propios trabajos de infraestructura, recuperación y mejora de Tragsa.

“Si el Grupo tiene que hacer una mejora, una  reconstrucción o rehabilitación, la realidad aumentada superá la forma de explicarlo, porque podremos verlo antes. Su impacto en el entorno, el resultado final…”, apunta, tras recordar que además las técnicas aplicadas pueden evitar el uso de los tradicionales paneles, evitando no sólo el posible deterioro sino evitando la afectación de la biodiversidad y permitiendo su actualización constante de contenidos.

Se abre ahora, por tanto, una fase que no tiene límites, porque además de todo su posible uso a través de las distintas Administraciones, la propia herramienta puede evolucionar e incluir un guía virtual  -”que en vez de locución, te reciba un personaje vestido de romano y te cuente lo que estás viendo”, pone como ejemplo-, o utilizar técnicas de juego y recompensas para explotar sus posibilidades educativas y turísticas, crear “perfiles por edad para que los contenidos se ajusten a sus intereses, su lenguaje, su aproximación tecnológica”.

Román insiste en su orgullo porque este proyecto, además, permite a los sucesivos “no tener que empezar de cero”, porque ya han pasado por las fases de prueba-error, las mejoras en las alertas visuales y sonoras, la posibilidad de utilizar el contenido sin necesidad de cobertura de datos y las dificultades para definir los pliegos de contratación, y  con la certeza “de que el Grupo da un servicio integral” a la sociedad y los ciudadanos.

“Estoy muy orgullos de trabajar en equipo y saber que lo que hago repercute como un bien a la sociedad. Ver convertido en un parque un antiguo vertedero, reconstruir de forma virtual un anfiteatro romano para que pueda volar la imaginación o que nos escriba una madre diciendo que gracias a participar en las rutas su hijo ha vuelto a leer y a estudiar son momentos enormemente gratificantes como profesional y como persona”, añade.

Y reflexiona, “somos más conocidos por otro tipo de actuaciones, de emergencia o de infraestructuras” pero también “desarrollamos proyectos” que aportan vida al territorio y que pueden ser el primer paso para encontrar nuevos usos a las herramientas tecnológicas y que las distintas Administraciones puedan hacer uso de ellas, “gracias al servicio integral de Tragsa a la sociedad”.