Imagen de un comedor escolar. Efeagro/Ángel Díaz

COMEDORES ESCOLARES

La pandemia lleva a usar aulas o medir el aire para los comedores escolares

Publicado por: EFEAGRO 6 de septiembre de 2021

Los centros escolares abren sus puertas esta semana para el nuevo curso y sus comedores prestarán servicio en un contexto aún de pandemia que obliga a reforzar medidas como distancias de 1,5 metros, puestos fijos, la posibilidad de comer en el aula o de medir los niveles de CO2 en el aire.

Son algunas de las acciones recogidas en el documento de prevención, higiene y promoción de la salud frente a la covid-19 en los centros educativos para este curso 2021-2022 y susceptible de revisión en función de la evolución de la pandemia, según se indica en el dossier consultado por Efeagro y que fue ratificado por el Gobierno y las comunidades autónomas el pasado 25 de agosto.
Este curso se reforzarán las medidas de prevención en los comedores tras “el nuevo conocimiento de transmisión por aerosoloes” y al ser unos espacios en los que “no se utiliza la mascarilla en todo momento”.

Las acciones propuestas en este dossier elaborado por el Ministerio de Sanidad y el Ministerio de Educación y Formación Profesional se centran en aforos, distancias, ventilación y reorganización de espacios.
Así, se deberá mantener la ventilación de manera permanente, en la medida de lo posible, e intensificarla entre los turnos de los diferentes grupos.
Si los centros escolares tienen una “duda razonable” sobre la adecuada ventilación de los comedores pueden optar por usar medidores de CO2 para evaluar la calidad del aire.

Los comedores, o espacios alternativos habilitados para las comidas, permitirán la distancia interpersonal de al menos 1,5 metros, salvo en el caso de pertenecer a un mismo grupo de convivencia estable.
A cada alumno se le asignará además un puesto fijo durante todo el año o, al menos, mientras la situación epidemiológica así lo aconseje.
Se garantizará la estanqueidad en el caso de los grupos de convivencia estable y se organizará el espacio del comedor y los horarios de forma que cada grupo de convivencia estable tenga su turno y espacio propio para comer.

Varios niños comiendo en un comedor escolar. Efeagro/Archivo. Ángel Díaz.

El dossier detalla que “siempre que sea posible” se reorganizarán los espacios para optimizar el cumplimiento de las medidas y, si es necesario, se podrán utilizar las propias aulas como comedor, de forma que se mantengan los grupos de convivencia.
En ese caso, las aulas dispensarán adecuadas condiciones higiénicas, de manera que se pueda comer en ellas respetando la seguridad alimentaria.
Se podrán asimismo habilitar mamparas de material no poroso que compartimenten el espacio para que puedan compartirlo, por ejemplo, dos grupos de convivencia estable.

En estos casos, se extremarán las medidas de ventilación cruzada y permanente, añade el documento.
Por otro lado, el dossier ratifica la intención de mantener abiertos los comedores durante todo el curso por ser un servicio “fundamental” para “asegurar el acceso a un menú saludable”.
De hecho, se especifican aspectos como la necesidad de aumentar el consumo de productos frescos, en especial frutas, verduras y hortalizas; reducir el consumo de alimentos ricos en grasas saturadas, sal y azúcares añadidos y evitar el consumo de alimentos ultraprocesados.

UNA FACTURACIÓN 32 % MÁS BAJA
Los responsables de elaborar esos menús son en muchas ocasiones empresas de restauración colectiva que están integradas en su mayoría en la federación Food Service España.
En dicha federación calculan que este curso, debido aún a la pandemia, la ocupación de los comedores escolares será del “60-70 %”, según la información facilitada a Efeagro.
Esto llevará a una disminución del 32 % de la facturación y en torno a 9.000 trabajadores con dificultades para determinar cuándo podrán incorporarse a sus puestos de trabajo.

A pesar de estas adversidades, el sector ha conseguido normalizar sus servicios acometiendo reformas para incrementar la elasticidad de cada organización, adaptándose a las nuevas condiciones y trabajando para seguir fortaleciendo la seguridad higiénico-sanitaria, la calidad alimentaria, la eficiencia y la sostenibilidad como vectores “indispensables” para su desarrollo futuro.
Según Food Service España, la pandemia ha supuesto un “verdadero” reto ante el cual las empresas han implementado medidas “excepcionales” con “importantes” cambios organizativos para “reducir contactos y evitar cualquier posible riesgo” y se logró con ello “le contagio cero” en los comedores.
En este curso se han reforzado “para seguir garantizando ese contagio cero”.

El negocio de los comedores representa un 34 % del total de la actividad de las empresas del sector, lo que se traduce, en datos precovid, en la elaboración de más de 1.300.000 menús al día y una generación de empleo de en torno a 31.000 puestos de trabajo directos.
Una de esas compañías es Serunion que este curso cuenta con un incremento de comensales del “5-6 %” respecto al curso anterior, “gracias a la estabilización de la situación”, han informado a Efeagro.

En esta empresa, “desde el primer momento”, pusieron en marcha “todas” las medidas sanitarias anti-covid “necesarias” para seguir ofreciendo sus servicios, y fue “la primera” empresa del sector en obtener la certificación Aenor de medidas frente a la covid-19.
Además, se tomaron otras decisiones como alargar los horarios de los servicios, aumentar los espacios de comedor o incorporar más personal para atender a “todos” los niños durante el tiempo que duraba el servicio en el comedor.

Secciones : EFEAgro