La industria del cacao y el chocolate es la primera contribuyente por valor de producción en el sector del dulce y en los últimos tres ejercicios ha aumentado su facturación a un ritmo anual superior al 5 %.
Así lo ha destacado este lunes la Asociación Española del Dulce (Produlce) con motivo del Día Internacional del Chocolate, que coincide con el nacimiento del escritor Roald Dahl, autor de “Charlie y la Fábrica de Chocolate”.
Produlce se ha sumado a la conmemoración de la efeméride con la presentación de su “Barómetro de la industria del cacao y chocolate“, destacada como una categoría “de primera”.
Esta industria representa el 27,6 % del valor de la producción de la industria del dulce, generando más de uno de cuatro euros facturados.
“La industria española del cacao y chocolate es fuerte y así lo ha demostrado con su capacidad de adaptación durante los últimos años asumiendo retos como la sostenibilidad, la reformulación de ingredientes o las ampliaciones de gama para satisfacer la demanda de los consumidores”, ha asegurado el secretario general de Produlce, Rubén Moreno, en una nota.
Referente de competitividad
El responsable ha señalado que dicha categoría es un “referente de competitividad en los mercados nacional e internacional de la industria alimentaria en general y del dulce en particular”.
La asociación calcula que más de siete de cada diez euros (el 73,5 %) generados por el mercado de productos de cacao y chocolate son producidos por la industria nacional.
Con la pandemia, ha detectado un aumento del consumo de productos como tabletas y cremas de untar en detrimento de otros vinculados a un consumo en exterior como los aperitivos o “snacks” o aquellos como los bombones, que tienen un componente social.
Impulso de las ventas de tabletas
Solo las tabletas de chocolate lideraron la categoría, al representar el 37,1 % del valor que generó la industria en 2020, según datos del barómetro.
Además, la innovación en productos de esa categoría supone el 60 % de las desarrolladas cada año por el sector del dulce en España, donde el 59 % de las innovaciones lanzadas al mercado son rediseños de productos, sobre todo con vistas a mejorar la sostenibilidad.
Moreno ha detallado que la facturación de esa categoría en el mercado interno creció un 12 % anual en 2020, confirmando su papel reservado para “momentos de indulgencia y placer en el hogar”, frente al descenso de las exportaciones.

El año pasado, el sector del cacao y el chocolate redujo su facturación exterior en un 9,4 % anual por las limitaciones de la pandemia, si bien sigue presentando los mayores intercambios comerciales de la industria del dulce, el 36,74 % del total.
Según Produlce, Europa es el destino principal de las exportaciones de cacao y chocolates, con el 78 % de la facturación exterior (más de la mitad de las ventas tienen como destino Francia, Portugal y Reino Unido).
Estados Unidos accedió por primera vez a la lista de los diez principales destinos de exportaciones de esa categoría, lo que demuestra que sus ventas están cobrando importancia junto a otros productos como caramelos, chicles, turrones o mazapanes.
Además, la Asociación Española del Dulce ha resaltado el empleo que genera la industria del cacao y el chocolate en el país, un total de 6.532 puestos de trabajo directos (el 1,3 % anual más en 2020), de los que el 63 % son ocupados por mujeres.