Nueva Pescanova ha incorporado a su nuevo consejero delegado, Ignacio González Hernández, hasta ahora director general de Campofrío. La empresa pesquera ganó 82,5 millones de euros en su ejercicio fiscal -cerrado el 30 de noviembre, poco antes de los bancos se hicieran con el 62 % de su capital-.
Licenciado en Empresariales por el ICADE, fue nombrado consejero delegado de Campofrío España en 2012 procedente de Carrefour, compañía en la que entró hace 24 años, cuando aún era Continente.
En esta cadena, ocupó varios cargos de responsabilidad como director de marcas propias, comercial o de investigación comercial.
Posteriormente, en el año 2008, pasó a ocupar el puesto de director ejecutivo de hipermercados de Carrefour España. Además, es presidente de la entidad sin ánimo de lucro dedicada al reciclaje de envases Ecoembes, en la que sustituyó a Marcos de Quinto, de Coca-Cola.
Hoy, Ignacio González tomará las riendas de la Nueva Pescanova cuyo consejo de administración estará presidido por el actual administrador único, Jacobo González Robatto.
La composición del consejo podría quedar cerrada el próximo mes de marzo en junta de accionistas (si hay nueve consejeros, uno de ellos sería de los antiguos accionistas, y si se nombran doce consejeros, dos pertenecerían a la Vieja Pescanova), según han declarado a Efeagro fuentes cercanas a la compañía.
La banca propietaria al 62,3 % de Nueva Pescanova (Banco Popular, Abanca, Sabadell,BBVA,Bankia, Caixabank,y UBI) estudia ampliar el capital de la nueva sociedad por un importe de entre 400 y 1.000 millones de euros, presumiblemente antes del verano, según las citadas fuentes.
Esta operación se realizaría a través de un canje de deuda por acciones de la sociedad, ya que según las citadas fuentes,”la compañía necesita más patrimonio y la opción más adecuada es buscar este capital en el mercado”.
La banca tomó el control de la nueva sociedad en diciembre, y la vieja Pescanova (titular del 20 % de la nueva compañía) decidió su vuelta a Bolsa.
Fuentes cercanas a la empresa aseguran que la intención de los bancos con la ampliación de capital es diluir a los accionistas de la antigua compañía, mientras que otras fuentes cercanas a la banca señalan que “esa no es la intención, ya que no tiene por qué diluirse si estos antiguos accionistas acuden a la ampliación”.
La intención de la Banca con esta ampliación es “contar con mayor capital, ya que con 100 millones de euros actuales y con un ebita de 30 millones, el grupo no puede sobrevivir”, según las citadas fuentes.
Ganó 82,5 millones antes de la entrada de los bancos
Pescanova ganó 82,5 millones de euros en su ejercicio fiscal -cerrado el 30 de noviembre, poco antes de los bancos se hicieran con el 62 % de su capital-, frente a los 1.927,19 millones de euros logrados el año anterior,según informó la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Según detalló, estos datos no son totalmente comparables, ya que los resultados de este último ejercicio corresponden al periodo comprendido entre diciembre de 2014 y noviembre de 2015, es decir, 12 meses, mientras que en 2014 se contabilizaron 11 meses.
A partir de ahora, “los ingresos y gastos corrientes serán poco significativos”, ya que “la estructura de costes se ha reducido significativamente al haberse convertido en una sociedad de cartera”, ha indicado.
Después de que la junta general de accionistas aprobase el 29 de septiembre la ampliación de capital de Nueva Pescanova, la sociedad es gobernada por un administrador único, con tan sólo el 20 % de participación de la
Vieja Pescanova, valorada provisionalmente por los administradores en 13,9 millones de euros.
Se trata de una sociedad “con una cuenta a cobrar a Nueva Pescanova por los pasivos no segregados valorados en 52 millones de euros que los bancos irán pagando en un plazo de siete años”, según la citada información ofrecida a la CNMV.
Pagos fijos de Nueva Pescanova
De hecho, Nueva Pescanova deberá abonar anualmente a la sociedad una cantidad fija de 255.000 euros anuales para cubrir los gastos generales de funcionamiento, según se estableció en el convenio de acreedores.
La valoración realizada por Pescanova (13,9 millones) presenta varias incertidumbres derivadas de las decisiones que los nuevos administradores de Nueva Pescanova puedan tomar y que podrían reducir sustancialmente dicho importe, según el citado comunicado.
La plantilla media ascendió a 30 de noviembre de 2015 a 721 trabajadores, frente a los 46 que trabajaban en 2014; esto fue gracias a la fusión por parte de Pescanova (sociedad absorbente) de las filiales Fricatamar, Pescanova Alimentación,Bajamar Séptima, Frinova, Frigodís, Frivipesca Chapela, Pescafina Bacalao, Pescafresca y Pescafina (sociedades absorbidas).
Al cierre de su ejercicio fiscal, la sociedad contabilizó un pasivo corriente de 25,5 millones de euros; de ellos, 12,3 millones correspondieron a deudas contraídas con los bancos