Es un placer degustar un plato elaborado por un chef con estrella Michelín, pero si el menú lo preparan mano a mano 10 chefs premiados con este galardón y la comida está inspirada en la cocina del mítico restaurante El Bulli, debemos encontrarnos en el firmamento de la gastronomía.
Este paraíso culinario es obra del chef malagueño Dani García que ha reunido a nueve colegas que ostentan estrellas Michelin para “revivir” la cocina del desaparecido restaurante El Bulli en la sesión inaugural de las jornadas gastronómicas “A cuatro manos”, que se celebran en su restaurante de Puente Romano Beach Resort de Marbella desde el sábado y hasta mañana.
Dani García, en declaraciones a los medios, calificó la noche del sábado de “única e irrepetible” y el homenajeado, Ferrá Adriá, de “la más mágica en el mundo”; y ambos debían estar en lo cierto cuando en una misma cocina se concentró tanta estrella de la creatividad culinaria.
En esta primera jornada, García cocinó “mano a mano” con los chefs Grant Achatz (Restaurante Alinea, de Chicago); Quique Dacosta (Restaurante Quique Dacosta, de Alicante); Joan Roca (Celler de Can Roca, en Girona); Juan Mari Arzak (Restaurante Arzak, de San Sebastián) o Ángel León (Restaurante Aponiente, de Cádiz).

A ellos se sumaron en este primer, Albert Adriá (Restaurante Pakta, de Barcelona); Andoni Luis Aduriz (Mugaritz, de Errentería); Ricard Camarena (Restaurante Ricard, de Valencia) y Nandu Jubany (Restaurante Can Jubany, de Barcelona).
La cocina del restaurante de Dani García nunca brilló tanto, pues además de las diez estrellas Michelín le acompañaron otros 40 cocineros; pero el chef malagueño se encargó de “manejar la nave”, según sus propias palabras, y al final todo fue “un caos ordenado”.
Ferrá Adriá estuvo presente en cada creación pues, “en la vanguardia de la alta cocina es muy difícil pensar un plato que no acabe hilando con El Bulli”, comentó García.
El chef malagueño hizo un símil futbolístico y aseguró que “Ferrá Adriá es a la cocina mucho más que Ronaldo o Messi al fútbol; porque estos no inventaron el regate ni la chilena y Ferrá sí ha hecho eso en la cocina”.
El homenajeado, Ferrá Adriá, reconoció que El Bulli fue el comienzo de “la cadena” de esta nueva generación de chefs y de esta “revolución gastronómica”. Y destacó que los diez chefs reunidos en esa noche conformaron un “grupo de amigos que no se repetirá, porque los nuevos son más competitivos”.
“La influencia de El Bulli está en cualquier parte: en Master Chef, en Top Chef y aquí, porque todos estos cocineros pasaron por el restaurante y dejaron su sello”, resaltó Adriá.
Cada chef preparó para esta brillante cena dos platos. La velada comenzó sorprendiendo a los comensales pues estos no encontrarían en la mesa ni platos, ni cubiertos, ni pan, ni agua, sino una caja.
Las propias estrellas Michelín sirvieron la comida en una primera fase que estuvo salpicada de “performance” y que el anfitrión definió como cocina de “locura y desenfreno”.
La segunda parte fue más convencional y lógica y los afortunados comensales comieron en la vajilla originaria de El Bulli, trasladada a Marbella para la ocasión.
El anfitrión preparó para esta cena especial una magdalena de zanahoria y bacalao ahumado que se comía entera, incluido el papel; y su tomate nitro por ser su plato más emblemático.
Las jornadas ya son un éxito antes de comenzar pues las 90 reservas previstas por día se han agotado y eso que el precio es de 400 euros por comensal para este homenaje a El Bulli; 300 euros para el resto de noches.
“Podríamos haber llenado siete restaurantes, y no es una exageración andaluza, porque va a ser imposible repetir de nuevo una cita como esta; es muy difícil coordinar agendas”, destacó García de esta velada.
Tras esta jornada de inauguración, Dani García cocinará con tres chefs internacionales, también con tres estrellas Michelin cada uno, durante tres noches.
El domingo lo hizo con Pascal Barbot (Astrance, Francia), hoy lunes lo hará con Grant Achatz (Restaurante Alinea en Estados Unidos) y por último, con Thomas Bühner (Restaurante La Vie de Alemania). EFEAGRO